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Síntomas de la costilla cervical

Los síntomas de la costilla cervical, que es un síndrome rara que provoca el crecimiento de una costilla en una de las vértebras del cuello, pueden incluir:

  • Carozo en el cuello;
  • Dolor en el hombro y el cuello;
  • hormigueo en los brazos, manos o dedos;
  • Manos y dedos rojos, especialmente durante días fríos;
  • Hinchazón de un brazo;

Estos síntomas son raros y surgen cuando la costilla se desarrolla completamente, comprimiendo un vaso sanguíneo o nervio y, por lo tanto, pueden variar de intensidad y duración según cada caso.

Costela cervical bilateral

Dedos roxos

Aunque la costilla cervical está presente desde el nacimiento, la mayoría de los pacientes sólo descubre entre los 20 y los 40 años, especialmente cuando la costilla está formada sólo por un montón de fibras, que no son visibles en la radiografía.

Así, cuando existen problemas de circulación en los brazos, dolor en el cuello o hormigueo constante de los brazos y de los dedos, pero no están presentes las causas comunes, como hernia cervical o síndrome del desfiladero torácico, se puede sospechar de síndrome de la costilla cervical.

Cómo tratar la costilla cervical

El tratamiento para costilla cervical debe ser orientado por un ortopedista y sólo es recomendado cuando el paciente presenta síntomas, siendo iniciado con consultas de fisioterapia para hacer ejercicios de estiramiento del cuello con el objetivo de mejorar la postura y aliviar la compresión de los vasos y los nervios. Sin embargo, cuando la fisioterapia no es capaz de aliviar los síntomas, el médico puede recetar la ingesta de analgésicos y antiinflamatorios, como Naproxeno o Diclofenaco, para aliviar el dolor y la inflamación del lugar.

En los casos más graves, en los que la fisioterapia y los medicamentos no son capaces de tratar los síntomas de la costilla cervical, los pacientes pueden optar por la cirugía de remoción de la costilla.