es.odysseedubienetre.be

Hernia de disco tiene cura

La hernia de disco puede ser curada con la cirugía para la corrección del disco intervertebral afectado o, en algunos casos de comprometimiento más leves, la alteración puede ser resuelta con técnicas de fisioterapia intensa, con reeducación postural y osteopatía, por ejemplo.

Estas técnicas ayudan a volver a colocar el disco en el lugar correcto de las vértebras, a través de tracciones, manipulaciones y estiramientos, capaces de disminuir los síntomas causados ​​por la compresión de los nervios de la columna. Sin embargo, la mayoría de los casos de hernia de disco no necesitan este tipo de tratamiento curativo, ya que los síntomas de esta enfermedad pueden ser controlados con el uso de medicamentos anti-inflamatorios, relajantes musculares y fisioterapia. Entiende cómo se trata el tratamiento para la hernia de disco.

Como se hace la cirugía

Hérnia de disco tem cura

La cirugía para hernia de disco, generalmente, es indicada para casos muy graves, en que el compromiso del disco intervertebral es muy grande, al punto del tratamiento, con el uso de medicamentos y otras técnicas, no ser eficiente .

Ella es hecha por el ortopedista o neurocirujano, bajo anestesia general, en un procedimiento que retira el disco intervertebral afectado. Este procedimiento también se puede hacer por vídeo, en el que un fino tubo se inserta en la piel con una cámara en la punta.

El tiempo de internación es rápido, generalmente 1 a 2 días, pero es necesario hacer un reposo de cerca de 1 semana en casa, y puede ser indicado el uso de un collar o chaleco para mantener la postura en este período. Las actividades más intensas, como los ejercicios físicos, se liberan después de 1 mes de la cirugía.

La fisioterapia debe mantenerse durante la recuperación, para ayudar a mejorar los movimientos y mantener una buena postura. Aprenda ejercicios fáciles para hacer en casa para mejorar la postura, y para evitar el dolor.

Cómo se realiza la fisioterapia

La fisioterapia para la hernia de disco varía de acuerdo con los síntomas y las limitaciones presentadas por el paciente.

Inicialmente, es necesario tratar el dolor, la inflamación y la incomodidad local, y para alcanzar este objetivo pueden ser necesarias varias sesiones de fisioterapia pasiva, con la ayuda de aparatos y con la toma de medicamentos anti-inflamatorios recetados por el médico.

Cuando estos síntomas son eliminados, el paciente puede realizar otro tipo de fisioterapia más intensa y asociar, aún, sesiones de osteopatía y técnicas de reeducación postural global (RPG), pilates e hidroterapia como forma de mantener el disco intervertebral en su lugar, que ha demostrado buenos resultados en la disminución de los síntomas.

Las sesiones de fisioterapia deben realizarse, preferentemente, 5 días a la semana, con descanso a los fines de semana. El tiempo total de tratamiento varía de un individuo a otro, pues mientras algunos alcanzan el alivio de los síntomas en 1 mes de tratamiento, otros necesitan más sesiones.