Neumoconiosis

Generalmente, la neumoconiosis afecta a individuos que están constantemente en lugares de trabajo con mucho polvo, como minas de carbón, fábricas metalúrgicas o obras de construcción y, por eso, es considerada una enfermedad ocupacional.

Así, al trabajar, el individuo inspira estas sustancias para las vías respiratorias que, con el paso del tiempo, provocan fibrosis en los pulmones, dificultando la expansión pulmonar y originando complicaciones respiratorias, como bronquitis o enfisema crónico.

Síntomas de la neumoconiosis

Los síntomas de la neumoconiosis son raros, pero incluyen:

Tos persistente;

• Dificultad para respirar;
• Apriete en el pecho.
• Se recomienda que trabajadores de ambientes con mucho polvo, como mineros o albañiles, hagan por lo menos 1 consulta en el neumólogo al año para detectar posibles enfermedades respiratorias, como la neumoconiosis.

Cómo evitar la neumoconiosis

La mejor forma de evitar la neumoconiosis es utilizar una mascarilla bien adaptada a la cara durante el trabajo, evitando respirar las sustancias químicas que provocan la enfermedad y lavar las manos, los brazos y la cara antes de ir a casa.

Sin embargo, el lugar de trabajo también debe proporcionar condiciones favorables, como tener un sistema de ventilación que aspire el polvo y los lugares para lavarse las manos, los brazos y la cara antes de abandonar el trabajo.

Tratamiento para neumoconiosis

El tratamiento para neumoconiosis debe ser orientado por un neumólogo, pero normalmente incluye el uso de medicamentos corticoides, como Betametasona o Ambroxol, para reducir los síntomas y facilitar la respiración.

Además, el paciente debe evitar estar en lugares muy contaminados o con polvo.