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Cariño inflamado en la axila o la ingle puede no ser leve

La presencia de huesos inflamados en la axila o la ingle puede ser una enfermedad llamada hidrosadenitis supurativa, que es una inflamación en las glándulas sudoríparas, es decir, en las glándulas que producen sudor. Esta enfermedad lleva a la formación de varias pequeñas heridas principalmente en regiones del cuerpo sofocadas y que producen mucho sudor, como axilas, ingle, ano y nalgas.

Así, las personas que poseen esta enfermedad pueden encontrar que están con forúnculos, pero las características de estas enfermedades son diferentes, pues en la hidrosadenitis los nódulos dejan cicatrices en la piel, lo que no sucede con los forúnculos. Aprenda cómo identificar y tratar los forúnculos haciendo clic aquí.

Caroço inflamado na axila ou virilha pode não ser íngua

Síntomas

Los primeros síntomas que pueden indicar la hidrosadenitis son:

  • Pequeñas regiones de la piel que se hinchan, duras, doloridas, inflamadas y rojizas;
  • Puede haber picazón, ardor y exceso de sudor;
  • Con el paso del tiempo, la piel puede pasar a ser azulada o morada debido a la falta de sangre.

Los nódulos causados ​​por la enfermedad pueden disminuir espontáneamente o estallar, liberando pus antes de que la piel cicatrice. En algunas personas después de algunas semanas o meses los nódulos vuelven, generalmente en el mismo lugar afectado anteriormente. En los casos en que aparecen varios nódulos o cuando son constantes y demoran a cicatrices, las heridas pueden aumentar y formar abscesos o úlceras, siendo más difíciles de tratar, necesitando de cirugía.

Regiones más afectadas

Las regiones del cuerpo más afectadas por la hidrosadenitis supurativa son la ingle, el periné, el ano, las nalgas y las axilas, pero esta enfermedad también puede aparecer en las aréolas de los senos y cerca del ombligo.

Esta enfermedad normalmente aparece en mujeres jóvenes y puede ser causada por alteraciones genéticas, debilidad en el sistema inmune o mala higiene de la región afectada, como quedarse más de 1 semana sin bañarse, por ejemplo.

Cómo saber si tengo

El diagnóstico de la hidrosadenitis supurativa se realiza a través de los síntomas presentados y de las características de las heridas en la piel y del historial del paciente, siendo ideal buscar un médico clínico general o un dermatólogo para identificar el problema aún al inicio y comenzar el tratamiento, tratamiento adecuado.

Tratamiento

La hidrosadenitis supurativa no tiene cura definitiva, pero durante las fases iniciales de la enfermedad el tratamiento tiene gran éxito en controlar los síntomas, y suele ser hecho con el uso de cremas con antibióticos e inyecciones de corticoides en el local afectado. En las etapas más avanzadas de la enfermedad, el médico también puede prescribir antibióticos en forma de comprimidos y medicamentos que controlan la producción de hormonas, principalmente en las mujeres.

En los casos más graves, puede ser necesario realizar una cirugía para eliminar la región de la piel con las glándulas defectuosas y sustituirla por injertos de piel sana, curando la enfermedad en aquella región operada.

Además, algunos cuidados generales se deben realizar durante el tratamiento en todos los casos, como mantener una higiene adecuada del lugar, evitar el uso de ropa apretada y aplicar compresas húmedas sobre las heridas. Vea cómo mantener la higiene íntima adecuada haciendo clic aquí.