Conozca lo que puede causar y cómo tratar la mareo en el anciano
La talla en el anciano es una de las quejas más comunes a partir de los 65 años de edad, descrita como sensación de desequilibrio y cambios en la visión, puede ser acompañada o no de mareos y vómitos. Cuando los mareos se vuelven más frecuentes, el anciano pasa a tener miedo de caer, volviéndose más sedentario, con mayores dificultades para realizar sus actividades del día a día, presentando baja de autoestima baja y tendencia a aislarse.
Causas de mareo en el anciano
Las causas de mareo en el anciano son diversas, pudiendo involucrar muchos sistemas del organismo. Entre las más importantes, se puede destacar:
- Enfermedades del sistema vestibular: mareos por alteración de posición del cuerpo o de la cabeza, enfermedad de Meniere, neurite vestibular;
- Enfermedades psiquiátricas: pánico, ansiedad, depresión;
- Enfermedades cardiovasculares: arritmias, jaquecas, infarto;
- Enfermedades neurológicas: traumatismo craneal, parkinson, esclerosis múltiple, lesiones en el cerebelo;
- Problemas en el sistema endocrino como diabetes;
- Problemas en los músculos, articulaciones, reflejos y postura;
- Exceso de medicamentos como diuréticos y betabloqueantes;
- Alteraciones de la visión: glaucoma, degeneración macular, retinopatía por diabetes.
Otras causas para la mareo en el anciano también pueden ser referidas como tensión baja, traumatismos de la arteria vertebral, enfermedades de la tiroides, SIDA y laberintitis.
Tratamiento para mareo en el anciano
El tratamiento para mareo en el anciano es complicado debido a las innumerables posibilidades de diagnóstico, por lo que sólo debe iniciarse después de que se hayan definido las causas correctas. Entre las conductas y orientaciones generales, es importante destacar:
- Tratar la enfermedad de base;
- Toma de medicamentos para el control de los síntomas vestibulares;
- Consultas periódicas con médico geriatra para evitar exceso de medicamentos;
- Tener mucho cuidado al levantarse de la cama o silla;
- En casos de déficit en la visión, véase la indicación de lentes o gafas;
- Adaptación de la casa para evitar las caídas.
Es importante subrayar que los ancianos con mareo, después del diagnóstico definido, se benefician de un programa de ejercicios individualizados , realizados en un ambiente seguro y acompañado por un fisioterapeuta. Los objetivos de la rehabilitación serán el fortalecimiento muscular, mejora del equilibrio, recuperación de las funciones perdidas y entrenamiento de las actividades del día a día, dando así más calidad de vida al anciano con mareos.