Cómo evitar la leche empedrada
Para evitar la leche empedrada es indicado vaciar completamente las mamas siempre que el bebé mamar, pero además algunos consejos que pueden ayudar a evitar la leche empedrada son:
- Dar de mamar o retirar la leche con la bombita cada 3 horas;
- Colocar bolsas de hielo entre las mamas para disminuir la hinchazón y
- Colocar compresas tibias en las mamas mientras está dando de mamar.
Utilizar un buen sujetador de lactancia y colocar discos absorbentes propios para esta fase pueden ayudar a acomodar mejor la mama.
El empedramiento de la leche generalmente es causado por el vaciamiento incompleto de las mamas, y genera síntomas como las mamas muy llenas y duras, molestias en las mamas y estragos de leche y ocurre normalmente entre el segundo y tercer día después del nacimiento del bebé, aunque puede en cualquier fase de la lactancia. La leche empedrada no hace mal para el bebé pero puede dificultar el agarre pues con la mama muy llena el bebé tiene más dificultad para abrazar y retirar la leche. Lo que se puede hacer es retirar un poquito de leche manualmente o con la bombita hasta que la mama quede más maleable y luego colocar al bebé para mamar.