Entender lo que es el síndrome de Savant
El síndrome de Savant o Síndrome del sabio porque Svant en francés significa sabio, es un trastorno psíquico raro donde la persona tiene graves déficit intelectuales . En este síndrome, la persona tiene serias dificultades para comunicarse, comprender lo que se le transmite y establecer relaciones interpersonales. Sin embargo, posee innumerables talentos, principalmente ligados a su extraordinaria memoria.
Este síndrome es más común desde el nacimiento, apareciendo frecuentemente en niños con autismo, pero también puede desarrollarse en la edad adulta cuando se sufre traumatismo cerebral, o alguna virosis con encefalitis, por ejemplo. El síndrome de Savant no tiene cura, pero el tratamiento ayuda a controlar los síntomas ya ocupar el tiempo libre, mejorando la calidad de vida de los portadores del síndrome.
Principales características del síndrome
La principal característica del síndrome de Savant es el desarrollo de una capacidad extraordinaria en una persona con discapacidad mental. Esta capacidad puede estar relacionada con:
Memorización:
- es la capacidad más común en estos casos, siendo común la memorización de horarios, listas telefónicas e incluso diccionarios completos; Cálculo:
- son capaces de hacer cálculos matemáticos complejos en pocos segundos, sin utilizar papel o cualquier aparato electrónico; Habilidad musical:
- son capaces de reproducir una pieza musical entera después de oír una sola vez; Habilidad artística:
- presentan excelente capacidad para dibujar, pintar o hacer esculturas complejas; Lenguaje:
- logran comprender y hablar más que una lengua, existiendo casos en que desarrollan hasta 15 lenguas diferentes. La persona puede desarrollar sólo una de estas capacidades o varias, siendo que las más comunes son las relacionadas con memorización de cálculo y habilidad musical.
Como se hace el tratamiento
Generalmente el tratamiento para el Síndrome de Savant se realiza con terapia ocupacional para ayudar en el desarrollo de la capacidad extraordinaria del paciente. Además, el terapeuta puede ayudar a la persona a mejorar sus capacidades de comunicación y comprensión a través de la utilización de esa capacidad.
Además, puede ser necesario hacer el tratamiento del problema que llevó al surgimiento del síndrome, como traumatismos o autismo. De esta forma, puede ser necesario un equipo de profesionales de la salud para ayudar a mejorar la calidad de vida del portador del síndrome.