Higroma cístico tiene cura?

El higroma cístico tiene cura, pero es posible que el tumor pueda volver después de algún tiempo y aún no se sabe explicar el motivo.

El tratamiento para el higroma cístico consiste en la aplicación de una inyección con sustancia esclerótica que pueda destruir el líquido que llena el tumor. Este líquido proviene de la circulación linfática y aunque no se sabe por qué forma el quiste, algunos individuos pueden desarrollarlo en la vida adulta.

El medicamento que mejor elimina el higroma cístico es el Ok432, que no tiene efectos colaterales y no es tóxico y consigue eliminar el tumor en la primera aplicación la mayor parte del tiempo. Dependiendo de la ubicación del quiste, el médico podrá realizar una ecografía para ver mejor el área a tratar con el fin de evitar la aplicación del medicamento en otros tejidos que provocan mayores daños.

Esta aplicación se realiza en la clínica o en el hospital y el individuo no necesita quedarse internado, aunque es necesario descansar y evitar esfuerzos en los tres días posteriores al tratamiento. Si el higroma es muy grande e impide el libre movimiento de la articulación cerca de su ubicación, como rodilla, codo o cuello, puede haber la necesidad de realizar algunas sesiones de fisioterapia para disminuir el dolor y aumentar la amplitud de los movimientos.

Cuando se trata de un higroma cístico fetal, el médico podrá evaluar la necesidad de realizar una cirugía para la retirada del quiste, pero esto dependerá de su ubicación. Los quistes localizados en la región subdural del cerebro o muy próximos a los órganos vitales deben ser observados por algún tiempo antes de iniciar la terapia y se debe evaluar el riesgo / beneficio de su retirada.