Síntomas, causas y tratamiento de la presión baja
La presión baja, también llamada hipotensión arterial, ocurre cuando la presión alcanza valores iguales o inferiores a 9 por 6 (90 mmHg x 60 mmHg). En general, los individuos con presión baja no presentan síntomas y, por lo tanto, esta situación normalmente no es problemática, pero hay algunas personas que pueden presentar síntomas como dolor de cabeza, mareo, debilidad o sensación de desmayo, por ejemplo.
La presión baja es peligrosa
en los pacientes graves que se presentan en estado de shock que puede ser por pérdida excesiva de sangre, por fallo del corazón, por infecciones graves como la sepsis, entre otras causas. En estos casos, el paciente necesita remedios en la vena para el aumento de la presión sanguínea, evitando la parada cardiorrespiratoria. Síntomas de baja presiónLos síntomas de baja presión incluyen:
Sensación de debilidad;
Vista oscura cuando el individuo se levanta rápidamente;
- Tontura y dolor de cabeza;
- Sueño o desmayo.
- El individuo con estos síntomas debe medir la presión para saber si realmente está baja y consultar al clínico general o al cardiólogo para diagnosticar el problema e iniciar el tratamiento adecuado.
- Vea en el siguiente vídeo el paso a paso para medir la presión correctamente:
Qué hacer cuando la presión es baja
Las directrices médicas a los pacientes que suelen presentar caídas de presión es que al inicio de los síntomas de mareo, sudor frío o malestar, el individuo:
Acuéstrese boca abajo, colocando las piernas sobre una silla, de forma que las mismas permanezcan más altas que el resto del cuerpo.
Elevar las piernas, hace que la sangre vuelva más fácilmente al corazón y al cerebro, normalizando la presión del paciente.
- Usar la sal en la presión baja, colocándolo debajo de la lengua, cuando el individuo presenta estos síntomas no se recomienda porque la sal no tiene efecto inmediato, puede tardar horas para aumentar la presión.
Para las personas que tienen tendencia a quedarse con la presión muy baja y con síntomas de presión baja, se recomienda comer de 3 en 3 horas y beber bastante agua a lo largo del día, para mantener la presión bajo control.
Presión baja en el embarazo
La presión baja en el embarazo es frecuente al inicio de la gestación, pero generalmente no trae complicaciones para el bebé, y está relacionada con la acción de la hormona relajina sobre las venas. Además, el feto necesita una mayor cantidad de sangre, por lo que, naturalmente, disminuye la cantidad de sangre en las arterias de la madre, causando la presión baja.
Si la gestante presenta síntomas de baja presión también debe acostarse boca arriba, manteniendo las piernas elevadas para normalizar la presión. Sin embargo, si no hay mejoría de los síntomas se recomienda que la mujer consulte a su obstetra para investigar las causas de esta hipotensión y su posible corrección.
Lea más detalles sobre la presión baja en el embarazo en: Conozca los riesgos y cómo tratar la presión baja en el embarazo.
Posibles causas de la presión baja
La presión baja puede ser provocada por:
Tener mucho tiempo de pie (hipotensión postural);
Calor excesivo;
- Hemorragia;
- Hipoglucemia;
- Insuficiencia cardíaca;
- Alimentación pobre en sal;
- Deshidratación.
- Otras causas comunes de la baja presión incluyen el uso de medicamentos laxantes, antihipertensivos y remedios para adelgazar.