es.odysseedubienetre.beEl estrés postraumático es un trastorno psicológico que provoca miedo excesivo después de situaciones muy chocantes, espeluznantes o peligrosas, como participar en una guerra, ser secuestrado, asaltado o sufriendo violencia doméstica, ejemplo. Además, en algunos casos, el trastorno también puede ocurrir debido a un cambio repentino en la vida, como perder a alguien muy cercano.
Aunque el miedo es una reacción normal del cuerpo durante y después de este tipo de situaciones, el estrés post traumático causa un miedo constante durante las actividades diarias, como ir de compras o estar en casa solo viendo la televisión, incluso cuando no hay ningún peligro aparente.
Para identificar si alguien está con estrés postraumático es importante estar atento a varios tipos de síntomas, que incluyen:
Este tipo de síntomas puede surgir después de un sentimiento específico o después de observar un objeto o oír alguna palabra que estuvo relacionada con la situación traumática.
Estos síntomas son frecuentes, no provocados por ninguna situación específica y, por lo tanto, pueden afectar muchas actividades básicas como dormir o concentrarse en una tarea.
Generalmente, este tipo de síntomas provoca cambios en la rutina diaria de la persona, que deja de hacer actividades que hacía anteriormente, como utilizar el autobús o el ascensor, por ejemplo.
Los síntomas cognitivos y de humor aunque son comunes en casi todos los casos después del trauma, desaparecen después de algunas semanas, y sólo deben ser preocupantes cuando empeoran a lo largo del tiempo.
Para confirmar la existencia de estrés postraumático se recomienda consultar a un psicólogo, para aclarar los síntomas e iniciar el tratamiento adecuado, si es necesario.
Sin embargo, es posible sospechar este trastorno cuando a lo largo de un mes aparece al menos 1 síntoma de revivenciación y de evitación, así como 2 síntomas de agitación y de humor. El tratamiento del estrés postraumático debe ser siempre orientado y evaluado por un psicólogo o psiquiatra, pues necesita ser constantemente adaptado para ayudar a cada persona a superar sus miedos y aliviar los síntomas que van surgiendo. En la mayoría de los casos, el tratamiento se inicia con sesiones de psicoterapia, en las que el psicólogo, a través de conversaciones y actividades didácticas, ayuda a descubrir y superar los miedos desarrollados durante el evento traumático. Sin embargo, puede ser necesario recurrir a un psiquiatra para iniciar el uso de medicamentos antidepresivos o ansiolíticos, por ejemplo, que ayudan a aliviar más rápido los síntomas de miedo, ansiedad y rabia durante el tratamiento, facilitando la psicoterapia.
