Ataxia: ¿Qué es y cómo tratar

La ataxia es un síntoma caracterizado por la falta de coordinación de los movimientos de diferentes partes del cuerpo. Puede tener varias causas, como problemas en el cerebelo, infecciones, factores hereditarios, hemorragias cerebrales, malformaciones o accidentes.

Generalmente, el individuo con ataxia camina con piernas abiertas que, en los primeros tiempos, surge sólo en actividades complicadas, como correr o subir escaleras, pero que con el tiempo evoluciona y surge en las actividades más simples, como caminar o hablar. La ataxia crónica no tiene cura, pero puede ser controlada para aumentar la calidad de vida del paciente. Así, el individuo debe consultar a un médico neurólogo para iniciar el tratamiento adecuado.

Tipos de ataxia

Algunos tipos de ataxia son:

Ataxia cerebelosa:

• lesiones en el cerebelo y en sus vías provocadas por hemorragia cerebral, tumor, infección o accidentes; Ataxia de friedreich:
• tipo más común de ataxia hereditaria que surge, principalmente, en la adolescencia y que provoca deformaciones en los pies y curvaturas en la espina vertebral; Ataxia espinocerebelar:
• tipo de ataxia hereditaria que surge generalmente en la edad adulta y provoca rigidez muscular, pérdida de memoria, incontinencia urinaria y pérdida progresiva de visión; Ataxia talengiectasia:
• tipo raro de ataxia hereditaria que se inicia en la infancia y se desarrolla a lo largo del tiempo. Normalmente, el paciente presenta un sistema inmune debilitado; Ataxia sensitiva o sensorial:
• provocada por lesiones en los nervios sensoriales que llevan al paciente a no sentir donde sus piernas se encuentran en relación al cuerpo. Dependiendo del tipo de ataxia, el paciente puede demostrar características diferentes.

Tratamiento para ataxia

El tratamiento para ataxia, normalmente, se hace con ejercicios de fisioterapia que disminuyen los movimientos descoordinados del paciente, al mismo tiempo que impiden el debilitamiento de los músculos o la rigidez muscular.

Además, se recomienda que el individuo con ataxia realice terapia ocupacional que busca mantener la mayor independencia posible, enseñando al paciente a vivir con la pérdida gradual de movimientos, a través de la adquisición de nuevas habilidades para hacer las actividades diarias.

En los casos más graves de ataxia el neurólogo puede aconsejar el uso de remedios antiespasmódicos y relajantes, como Baclofen o Tizanidine, o inyecciones de botox en los músculos contraídos.