¿Qué es la vejiga neurogénica y los principales tipos

La vejiga neurogénica es la incapacidad de controlar el acto de orinar debido a una disfunción en la vejiga o esfínter urinario, que puede tener diversas causas, que incluyen desde alteraciones en los nervios que impiden que los músculos de la región funcionen correctamente como, también, situaciones que irritan la región, como cambios hormonales, inflamaciones en la vejiga o infecciones, por ejemplo.

La vejiga neurogénica puede o no tener cura, lo que se define después de la evaluación del urólogo, que podrá determinar sus causas y definir si es del tipo hipoactivo, cuando los músculos no consiguen contraer en el momento adecuado, o hiperactivo, cuando existe contracción excesiva de los músculos y pérdida involuntaria de la orina.

A partir de entonces, el médico podrá definir entre las opciones de tratamiento, que incluyen el uso de medicamentos, como Oxibutinina, Tolterodina o aplicación de toxina botulínica, por ejemplo, además de fisioterapia, uso de sonda vesical o realización de cirugía.

Principales tipos y síntomas

En la vejiga neurogénica, hay una alteración en los nervios que controlan los músculos que envuelven la vejiga o el esfínter urinario, que no logran relajarse o contraer en el momento adecuado.

Así, la persona con esta alteración pierde la capacidad de orinar de forma coordinada, de acuerdo con su voluntad. Dependiendo del tipo de alteración, la vejiga neurogénica puede ser:

1. Vejiga Hiperactiva

También se conoce como vejiga espástica o vejiga nerviosa, pues la vejiga se contrae de forma involuntaria, por lo que la pérdida de orina de forma inesperada y en momentos inapropiados .

• Síntomas: incontinencia urinaria, voluntad de orinar frecuente y en poca cantidad, dolor o ardor en la región de la vejiga, pérdida del control de la capacidad de orinar.

La vejiga hiperactiva es más común en las mujeres, pudiendo ser estimulada por cambios hormonales en la menopausia, o por el aumento del útero en el embarazo. Más información sobre cómo identificar la vejiga hiperactiva.

2. Vejiga Hipoactiva

También se conoce como vejiga flácida, pues la vejiga no es capaz de contraerse voluntariamente, o el esfínter no es capaz de relajarse, lo que provoca el almacenamiento de orina, sin la capacidad de eliminarla de forma adecuada.

• Síntomas: sensación de que la vejiga no vació completamente después de orinar, goteo después de orinar o pérdida de orina involuntaria. Esto aumenta las posibilidades de infección urinaria y perjuicio en la función de los riñones, por lo que el tratamiento debe iniciarse lo más rápido posible.

Posibles causas

Las causas de la vejiga neurogénica pueden ser:

• Irritación de la vejiga, por infección urinaria o alteraciones hormonales, como en la menopausia;
• Alteraciones genéticas, como ocurre en la mielomeningocele;
• Enfermedades neurológicas reversibles como neurocisticercosis o neuroesquistosis;
• Compresión de los nervios de la región lumbar por hernia de disco;
• Accidente que lesiona la columna, causando paraplejia o tetraplejia;
• Enfermedades neurológicas degenerativas como la esclerosis múltiple o el Parkinson;
• Compromiso neurológico post-AVC;
• Alteraciones neurológicas periféricas por la diabetes;
• Pérdida de la elasticidad de la vejiga, causada por inflamaciones, infecciones o alteraciones neurológicas en general. En hombres, la próstata aumentada puede simular muchos síntomas de vejiga neurogénica, siendo una importante causa reversible de alteración de la función de los músculos urinarios.

Cómo confirmar

Para diagnosticar la vejiga neurogénica, el urólogo evaluará la historia clínica de la persona, con detalle de los síntomas, y el examen físico, además de solicitar exámenes que logren observar el funcionamiento del tracto urinario, como ultrasonografía, radiografía con contraste, uretrocistografía y examen urodinámico, para evaluar la contracción de los músculos urinarios en el momento de la micción.

Como se hace el tratamiento

El tratamiento para la vejiga neurogénica es complejo y puede implicar:

Uso de medicamentos

• del tipo agonistas parasimpáticos, como el cloruro de betanecol, los antimuscarínicos, como oxibutinina (Retemic) o tolterodina, además de otros agentes que actúan sobre los neurotransmisores, como glutamato, serotonina, noradrenalina, dopamina y ácido gamma-aminobutírico (GABA), utilizados según cada caso; Toxina botulínica (botox)
• , que puede ser usada para disminuir la espasticidad de algunos músculos;Sondaje intermitente
• , que es el paso de sonda vesical, que puede ser usado periódicamente por el propio paciente (4 a 6 veces al día) y removido después del vaciado de la vejiga;Cirugía
• , que puede ser para mejorar la funcionalidad de la vejiga o desviar la orina hasta una abertura externa (ostomía) creada en la pared abdominal;Fisioterapia
• , con ejercicios para fortalecer el pavimento pélvico. Ver como se hace la fisioterapia para incontinencia urinaria.El tipo de tratamiento dependerá de la causa de la enfermedad, buscando su solución. Sin embargo, cuando esto no es posible, el médico puede indicar una combinación de tratamientos para mejorar la calidad de vida de la persona, además de evitar infecciones de repetición y el deterioro renal.

¿La vejiga neurogénica tiene cura?

La vejiga neurogénica puede tener cura cuando es provocada por causas reversibles, como infección urinaria o infección cerebral por neurocisticercosis, por ejemplo, presentando mejoría después del tratamiento. Sin embargo, en muchos casos, la vejiga neurogénica no tiene cura, pero el tratamiento puede ayudar a mejorar el tono muscular, aliviar el síntoma y mejorar la calidad de vida de la persona. Para ello, es importante tener un seguimiento con el urólogo y, en algunos casos, neurólogo.