Retención de líquidos, que hacer

Para disminuir la retención de líquidos es necesario beber agua, cerca de 2 litros por día, o té, como el té de caballito, y evitar los alimentos como los enlatados, embutidos u otros que tengan mucha sal.

Además, otra sugerencia importante es sustituir la sal para preparar o condimentar los alimentos por hierbas aromáticas, como perejil o orégano, por ejemplo. Disminuir la cantidad de sal por día también es fundamental, por eso, sepa la cantidad de sal que se debe consumir por día.

Otros cuidados importantes para tratar la retención de líquidos son:

Aumentar el consumo de alimentos diuréticos, como sandía, pepino o tomate;

Evitar quedarse mucho tiempo de pie, sentado o con piernas cruzadas;

Ingerir alimentos ricos en agua, como rábano, nabo, coliflor, sandía, fresa, melón, piña, manzana o zanahoria;

Hacer drenaje linfático, que es un masaje específico para reducir el exceso de líquido en el cuerpo;

Comer alimentos como hojas de remolacha cocida, aguacate, yogur desnatado, jugo de naranja o plátano porque son alimentos ricos en potasio, que ayuda a disminuir la sal del organismo;

Colocar las piernas hacia arriba al final del día.

En el tratamiento para la retención de líquidos la alimentación es fundamental, pero también se pueden utilizar medicamentos como diuréticos, que deben ser prescritos por el médico, de acuerdo con las causas de la retención hídrica. Las causas de la retención hídrica pueden ser alimentarias, como exceso de sal en la alimentación o falta de agua en el organismo, pero también pueden originarse en otros problemas de salud, como períodos de gran variación hormonal, dificultad de funcionamiento de los riñones, enfermedades del hígado , problemas cardiacos o cambios en el funcionamiento de la tiroides.