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Tratamiento para la contractura muscular

El tratamiento de la contractura muscular se puede hacer en casa con un baño de agua caliente, ejercicios de estiramiento y un masaje hecho con aceites calientes. Sin embargo, cuando esto no es suficiente y la contractura muscular persiste, es importante buscar ayuda médica y un fisioterapeuta.

La contractura muscular es una de las causas más frecuentes de dolor de espalda, sobre los hombros y el cuello, pero puede ocurrir en cualquier otra área del cuerpo. Además, es común su aparición en la pantorrilla y los muslos debido a la acumulación de ácido láctico producido durante la práctica de ejercicios físicos.

Pasos para tratar la contractura muscular en casa

Algunos pasos que se pueden utilizar para tratar la contractura en casa son:

  1. Tomar un baño con agua caliente y dejar que el chorro de agua caiga directamente en la región de la contractura;
  2. Colocar una bolsa de agua caliente en la región dolorida;
  3. Hacer un pequeño masaje en el lugar, utilizando una crema hidratante o aceite calentado;
  4. Hacer algunos estiramientos, estirando suavemente el músculo afectado. Vea algunos ejemplos en el siguiente vídeo:

Imagem ilustrativa do vídeo: Alongamento para o Dia a Dia

Si sigue después de seguir estos pasos, la contractura muscular continúe doliendo, es importante consultar a un médico o fisioterapeuta. Para el tratamiento el médico podrá indicar el uso de un relajante muscular como el Miosan, por ejemplo y podrá solicitar exámenes como radiografía o resonancia, si hay sospechas de otras situaciones más graves. Vea algunos de los relajantes más usados ​​en Remedios con Efecto Relajante.

Señales de mejora de la contractura muscular

Las señales de mejora de la contractura son alivio del dolor, aumento de la amplitud de movimientos y disminución de los puntos dolorosos en la región afectada. El músculo se vuelve más maleable y menos dolorido. Los signos de empeoramiento que pueden ocurrir son permanencia de la contractura, que se vuelve mayor y más dolorida y la formación de fibrosis en la región de la contractura, que sólo podrá ser solucionada con sesiones de fisioterapia. Dependiendo del lugar de la contractura puede haber irradiación del dolor a otros lugares y sensación de hormigueo, cuando el nervio se ve afectado.

Los signos de empeoramiento surgen cuando el individuo no sigue el tratamiento correctamente y cuando la causa de la contractura no se ha eliminado y, por lo tanto, es importante hacer reposo durante el tratamiento.

Cómo evitar las contracturas musculares

Una buena forma de evitar el surgimiento de las contracturas musculares es realizar estiramientos musculares antes y después de los ejercicios, y mantener los músculos suficientemente fuertes practicando regularmente actividad física. Mantener la buena postura también es muy importante para evitar compensaciones musculares y las consiguientes contracciones.

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