Cómo saber si es Dengue, Zika o Virosa
Los síntomas del dengue incluyen fiebre, dolor en el cuerpo y cansancio fácil, que también son comunes en Zika y en virosis. Por eso, para saber realmente si es dengue se deben observar todos los síntomas presentados y también su intensidad para poder informar al médico con el máximo de detalles.
Aprenda qué hablar para el médico y qué exámenes hacer para llegar al diagnóstico correcto y seguir el tratamiento más indicado.
Cuando es dengue
En el dengue los síntomas son más fuertes, la fiebre es más alta, sobrepasando los 38ºC. Además, durante el verano cuando la epidemia de dengue es mayor en varios estados de Brasil existe una mayor sospechosa de esa enfermedad en relación a los virosis, por ejemplo.
Cuando es Zika
Los síntomas de Zika son más blandos que los del dengue y duran menos tiempo. La fiebre no pasa de los 38ºC y la persona puede sentir dolor de cabeza, pero ésta es más frecuente en el fondo de los ojos.
Los síntomas del dengue y de la Zika son muy similares y no hay ningún examen que pueda identificar estos virus y que esté disponible para toda la población, por lo que el médico hace el pronóstico de dengue o de Zika cuando hay más casos similares en la misma región.
Cuando es virosa
Normalmente el médico indica que es una virosis cuando los síntomas son leves como fiebre baja, pérdida del apetito y dolores en el cuerpo, que pueden dejar a la persona más cansada. Cuando estos síntomas ya están presentes durante más de 3 días y no surgen otros y no está en época de dengue, el médico puede llegar a la conclusión de que se trata de una virosis.
Esta hipótesis es reforzada cuando atiende a varios pacientes dentro de la misma región que presentan los mismos síntomas, lo que es común en los niños que frecuentan la misma guardería o escuela, por ejemplo.
Qué decir para el médico para ayudar en el diagnóstico
Cuando la persona presenta síntomas como fiebre, dolor en los músculos, molestia y cansancio debe ir al médico para descubrir lo que está sucediendo. En la consulta médica es importante dar detalles como:
- Síntomas presentados, destacando su intensidad, frecuencia y orden de su aparición;
- donde vive y los últimos lugares frecuentados porque en época de epidemia de dengue se debe verificar si estuvo cerca de los locales con más casos registrados de la enfermedad;
- Casos similares en la familia o en los vecinos;
- Cuando los síntomas surgidos porque los síntomas surgidos después de una comida, esto puede indicar una infección intestinal, por ejemplo.
Hablar si ya ha tenido estos síntomas antes y si ha tomado algún remedio también puede ayudar al médico a descubrir de qué enfermedad se trata, facilitando la solicitud de exámenes y el tratamiento más indicado para cada caso.
Enfermedades con síntomas similares al dengue
Muchas enfermedades pueden tener síntomas parecidos a los síntomas del dengue, por lo que frente a una sospechosa de dengue es importante buscar ayuda médica para hacer el diagnóstico correcto e implementar el tratamiento adecuado. Algunas enfermedades que pueden confundirse con el dengue porque también provocan fiebre y dolor en el cuerpo son:
Zika:
- La fiebre es más blanda y las pollitas en la piel empiezan en la cara; Virose:
- Tiene síntomas leves y puede ser transmitida a otras personas que pasan a presentar los mismos síntomas; Fiebre amarilla:
- Más común en el Norte de Brasil y algunos países africanos, afectando a personas que no han sido vacunadas contra la fiebre amarilla y pueden ser identificadas en un examen de sangre; Sarampión:
- Las manchas en la piel suelen ser un poco más grandes que las causadas por el dengue y la Zika y aparecen en personas que no han tomado la vacuna contra el sarampión en la niñez y pueden identificarse en un examen de sangre; Hepatitis A, B y C:
- Poseen otros síntomas como alteración en el color de la piel, orina y heces y también puede ser identificada en un examen de sangre. Así, cuando sólo los síntomas no son suficientes para el diagnóstico del dengue, se deben realizar exámenes de sangre y de orina, por ejemplo, para identificar las posibles causas.
A pesar de que no existe un examen que identifique exactamente el dengue la presencia de síntomas de dengue y la ausencia de alteraciones en los exámenes de sangre pueden fortalecer la hipótesis de dengue, porque normalmente las otras enfermedades pueden ser identificadas a través de exámenes específicos.