Estómago de sandía (Ectasia vascular antral gástrica)
A pesar del nombre, el estómago de sandía no es una enfermedad agradable, de ninguna manera, y debido a su gravedad, es importante poder reconocer los síntomas y las causas de este trastorno inusual.
Diagnóstico del Estómago de Sandía
El diagnóstico del estómago de sandía se puede lograr a través de varias pruebas, como una endoscopia, biopsia y ultrasonido, entre otros.
Endoscopia
Este enfoque para el diagnóstico implica enviar un tubo pequeño con una luz y una cámara al sistema gastrointestinal para ver si las rayas características y el sangrado están presentes en el estómago.
Biopsia
Una biopsia consiste en extraer una pequeña porción de tejido de la parte afectada del cuerpo para determinar si ha sido infectada por una enfermedad específica.
Ultrasonido
Un ultrasonido permite a los médicos obtener imágenes de la sección final de su estómago, donde puede identificar la hinchazón y la dilatación de los vasos sanguíneos que indican esta afección.
Tratamiento para el Estómago de Sandía
Para eliminar el estómago de sandía, las mejores opciones incluyen cirugía, ciertos medicamentos e incluso transfusiones de sangre, así como alteraciones dietéticas.
Cirugía: la cirugía endoscópica con láser ayudará a sellar los vasos sanguíneos rotos. La coagulación con plasma de argón es otra opción de tratamiento que puede sellar tejido roto y sangrado.
Medicamentos: se ha demostrado que los corticosteroides son un tanto exitosos, al igual que la terapia hormonal, para minimizar los síntomas de esta afección.
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Dieta: debe cambiar su dieta para evitar alimentos ácidos y fuertes. Comer muchas más sopas y batidos puede provocar un descanso en el estómago; también debe evitar la cafeína y el alcohol hasta que desaparezcan los síntomas.
Transfusiones: si se ha perdido una cantidad significativa de sangre, se pueden necesitar transfusiones para compensar la pérdida de sangre.