Cómo funciona y cuáles son los beneficios de la magnetoterapia

La magnetoterapia es una alternativa de tratamiento natural que utiliza imanes y sus campos magnéticos para aumentar el movimiento de algunas células y sustancias corporales como el agua para obtener efectos como disminución de la dolor, aumento de la regeneración celular o reducción de la inflamación, por ejemplo.

Para hacer esta técnica, los imanes se pueden insertar en bandas de tejido, pulseras, zapatos y otros objetos, de forma que se mantengan cerca del lugar a tratar, o el campo magnético puede ser producido por un pequeño aparato que se coloca junto a la pared piel, en el lugar a tratar.

La intensidad del campo magnético, así como el tamaño de los imanes deben ser adaptados al tipo de problema a tratar y, por eso, la magnetoterapia debe ser siempre hecha por un terapeuta calificado para adecuarla correctamente a las necesidades de cada persona.

Principales beneficios

Debido a los efectos de los campos magnéticos sobre el cuerpo humano, algunos estudios indican beneficios como:

1. Aumento de la circulación sanguínea, ya que el campo magnético logra disminuir la contracción de los vasos sanguíneos;
2. Alivio rápido del dolor, pues estimula la producción de endorfinas, que son sustancias analgésicas naturales;
3. Disminución de la inflamación, debido al aumento de la circulación y reducción del pH de la sangre;
4. Aumento de la regeneración de células, tejidos y huesos, porque mejora el funcionamiento de las células
5. Prevención del envejecimiento precoz y del surgimiento de enfermedades, ya que elimina toxinas que dañan las células y perjudican la salud. Para obtener este tipo de beneficios la magnetoterapia debe ser repetida por más de una sesión, siendo que el tiempo de tratamiento debe ser indicado por el terapeuta de acuerdo con el problema a tratar y la intensidad del campo magnético.

Cuando se utiliza

Esta técnica se puede utilizar siempre que sea necesario y posible acelerar el proceso de recuperación. Así, a veces se utiliza en la fisioterapia para ayudar en el tratamiento de casos de fracturas, osteoporosis, lesiones en los nervios, artritis reumatoide, tendinitis, epicondilitis o osteoartritis, por ejemplo.

Además, debido a su efecto de regeneración celular, la magnetoterapia también puede ser indicada por enfermeros o médicos en el proceso de cicatrización de heridas difíciles, como escaras o pie diabético.

Quien no debe usar

Aunque tiene varios beneficios, la magnetoterapia no se puede utilizar en todos los casos, especialmente debido a todos los cambios que provoca en el organismo. De esta forma, está contraindicada en los casos de:

Cáncer en cualquier parte del cuerpo;

• Hipertiroidismo o funcionamiento exagerado de las glándulas suprarrenales;
• Miastenia grave;
• Hemorragias activas;
• Infecciones fúngicas o virales.
• Además, esta técnica debe usarse con cuidado en pacientes con convulsiones frecuentes, arteriosclerosis grave, presión baja, a tratar con anticoagulantes o con trastornos psiquiátricos graves. Los pacientes con marcapasos sólo deben utilizar la magnetoterapia después de la aprobación del cardiólogo, ya que el campo magnético puede alterar el ajuste del ritmo eléctrico de algunos aparatos de marcapasos.