5 Principales causas de agua en el pulmón
Generalmente, la acumulación de líquido en el pulmón ocurre cuando se tiene un problema en el sistema cardiovascular, como insuficiencia cardíaca, pero también puede surgir cuando existe una lesión en el pulmón, como infecciones o exposición a toxinas, por ejemplo.
1. Problemas cardiovasculares
Cuando las enfermedades del sistema cardiovascular no se tratan adecuadamente pueden provocar un aumento excesivo de la presión dentro del corazón, impidiendo que la sangre sea bombeada correctamente.
Cuando esto ocurre, la sangre se va acumulando alrededor de los pulmones y aumenta la presión dentro de los vasos en esa región, haciendo que el líquido, que forma parte de la sangre, sea empujado hacia el interior de los pulmones, ocupando un espacio que debía estar sólo llenado de aire. Algunas de las enfermedades cardiovasculares que más comúnmente provocan esta alteración incluyen:
Enfermedad coronaria:
esta enfermedad provoca el estrechamiento de las arterias del corazón que debilita el músculo cardíaco, disminuyendo su capacidad para bombear la sangre;
- Cardiomiopatía: en este problema el músculo cardíaco va debilitándose sin tener una causa relacionada con el flujo de sangre, como en el caso de la enfermedad coronaria;
- Problemas en las válvulas cardíacas: cuando las válvulas no pueden cerrar completamente o abrir adecuadamente, la fuerza del corazón puede empujar sangre excesiva a los pulmones;
- Presión alta: esta enfermedad dificulta el funcionamiento del corazón que necesita hacer mucha fuerza para bombear la sangre. A lo largo del tiempo, el corazón puede perder la fuerza necesaria, llevando a la acumulación de sangre en los pulmones.
- Además, otras condiciones, como problemas renales, también pueden aumentar la presión sanguínea y dificultar el trabajo del corazón, llevando a un caso de edema pulmonar, cuando no se tratan adecuadamente. 2. Infecciones pulmonares
Algunas infecciones pulmonares causadas por virus, como el Hantavirus o el virus del Dengue, pueden causar cambios en las presiones de los vasos sanguíneos de los pulmones, provocando la acumulación de líquido.
3. Exposición a toxinas o humo
Cuando ocurre la respiración de toxinas, como amoníaco o cloro, o de humo de cigarrillo, por ejemplo, los tejidos del pulmón pueden estar muy irritados e inflamados, produciendo líquido que ocupa el espacio dentro de los pulmones .
Además, cuando la inflamación es muy severa, pueden producirse lesiones en los pulmones y en los pequeños vasos sanguíneos alrededor, permitiendo la entrada de líquido.
4. Ahogamiento
En situaciones de casi ahogamiento los pulmones se llenan de agua que es aspirada por la nariz o la boca, acumulándose en el interior de los pulmones. En estos casos, aunque el agua ha sido removida con las maniobras de salvamento, el edema pulmonar puede mantenerse, precisando ser tratado en el hospital.
Vea lo que debe hacer en caso de ahogamiento para salvar la vida de la víctima.
5. Grandes altitudes
Las personas que hacen montañismo o escalada presentan un mayor riesgo de desarrollar edema pulmonar, pues cuando se está en altitudes superiores a 2400 metros los vasos sanguíneos sufren un aumento de presión. Este aumento de presión puede provocar la entrada de líquido a los pulmones, especialmente en los principiantes de este tipo de deportes.
Consulte los síntomas que pueden alertar a un caso de agua en el pulmón.