El boro es un mineral traza vital que beneficia el crecimiento normal y la salud del cuerpo. Muchas condiciones peligrosas, como la artritis y la osteoporosis, se tratan de manera natural y también ayudan a reducir los síntomas de la menopausia. Se cree que mejora la capacidad natural del cuerpo humano para absorber calcio y magnesio.
Las frutas como manzanas, naranjas, uvas rojas, peras, ciruelas, kiwis, sultaninas, dátiles, así como ciertas verduras, aguacate, soja y nueces son fuentes ricas en boro. Los garbanzos, frijoles borlotti, avellanas, grosellas, mantequilla de maní, frijoles rojos, tomate, lentejas, aceitunas, cebolla, vino de patata y cerveza también son fuentes notables de este mineral esencial.
Aunque no se comprenden completamente todos los síntomas de deficiencia de boro, se sabe que esta deficiencia podría dar como resultado el metabolismo anormal del calcio y el magnesio. Algunos de los otros síntomas incluyen hipertiroidismo, desequilibrio de la hormona sexual, osteoporosis, artritis y mal funcionamiento de los nervios.
Este mineral traza es crucial para incluirlo en la dieta diaria para garantizar una vida sana y libre de enfermedades. Algunos de sus beneficios incluyen los siguientes:
El boro es una opción de tratamiento exitosa para la artritis y en más del 95% de los casos, se notó una mejoría significativa ya que aumentó de manera efectiva la integración de calcio en el cartílago y los huesos. Con el aumento de la edad, los huesos pueden volverse débiles y porosos, y el boro puede detener este deterioro al garantizar que los niveles de calcio se maximicen y se usen con eficacia.
El boro es capaz de aumentar el nivel de testosterona en los hombres; esta cualidad es cada vez más aprovechada por los culturistas y atletas masculinos. Aunque algunos levantadores de pesas prefieren tomar sus suplementos para mejorar sus niveles de testosterona, no ha habido evidencia concreta o explicación del mecanismo por el cual ayuda a hacerlos más exitosos.
Las capacidades de construcción del hueso del boro a menudo se ignoran a favor del calcio. Sin embargo, en realidad funciona al unísono con calcio para fortalecer los huesos. Desempeña un papel muy importante en la minimización de los riesgos de la osteoporosis y la artritis. También ayuda en el metabolismo de minerales que están involucrados en el desarrollo óseo, como calcio, magnesio y cobre. Además, afecta a varias hormonas, incluidos el estrógeno y la testosterona, que también están relacionadas con la salud general de los huesos.
El boro puede mejorar la producción de estrógeno en las mujeres menopáusicas y puede recuperar su impulso sexual a los pocos días de tratamiento. Aumenta el nivel de hormonas sexuales naturales en el cuerpo, lo que reduce la necesidad de terapia de reemplazo hormonal u otras soluciones farmacéuticas.
El boro parece ser esencial para la reproducción y el desarrollo del feto, aunque no hay mucha información disponible sobre esta propiedad, la investigación está en curso.
El boro puede aliviar los síntomas como los sofocos y los sudores nocturnos que típicamente se asocian con la menopausia y asegura que el nivel mineral se mantenga en niveles apropiados ya que las mujeres posmenopáusicas a menudo sufren desequilibrios hormonales que pueden sesgar muchos de los sistemas importantes del cuerpo.
Los agentes de captura de neutrones de boro se utilizan para la terapia del cáncer y en el desarrollo de inhibidores de enzimas fuertes. Sus compuestos también se usan como imitaciones de anticuerpos que pueden identificar fácilmente sacáridos biológicamente importantes.
Desempeña un papel importante en el mantenimiento de las funciones de la membrana celular y de los órganos, y en la estabilización de los receptores de hormonas para que los procesos corporales se desarrollen sin problemas.
El boro reduce en gran medida las condiciones alergénicas e inflamatorias que típicamente se asocian con la artritis reumatoide.
Se cree que el boro puede influir en algunos de los factores de coagulación de la sangre en el cuerpo. Sin embargo, se necesitan más estudios para autenticar este hallazgo, lo que lo convertiría en un aliado importante en la lucha contra la enfermedad cardíaca.
El boro ayuda a reducir la acumulación de lípidos y permite la eliminación del colesterol a través de diversos medios, lo que reduce las posibilidades de desarrollar enfermedades como la aterosclerosis y los coágulos de sangre, y protege el cuerpo contra los accidentes cerebrovasculares y los ataques cardíacos.
El boro protege al cuerpo de una serie de ataques parasitarios como Candida albicans y otras infecciones fúngicas.
El boro puede aliviar significativamente las dificultades causadas por las condiciones de insuficiencia cardíaca congestiva.
Los estudios han demostrado que el boro puede mejorar la función cerebral, la coordinación ojo-mano, la memoria a corto plazo y el poder de concentración.
El boro puede inhibir la formación o la actuación de algunas enzimas dañinas, al tiempo que sirve como un cofactor de otras reacciones enzimáticas beneficiosas.
Ver tambiénPalabra de advertencia : los síntomas de su toxicidad por sobredosis incluirían náuseas, vómitos, debilidad y dermatitis. En algunos casos, también se experimentan anomalías esqueléticas. Normalmente, se absorbe fácilmente y se excreta en la orina. Sin embargo, en personas con problemas renales, puede acumularse en el corazón, los riñones, el cerebro y los tejidos, así que tenga en cuenta cuánto está absorbiendo, especialmente si está usando suplementos de alta concentración.
Sin embargo, incluso las cosas buenas deberían consumirse con moderación.