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Posoperatorio de la cirugía cardíaca infantil

La cirugía cardíaca en la infancia es recomendada cuando el niño nace con un problema cardiaco grave, como estenosis valvular, o cuando tiene una enfermedad degenerativa que puede causar lesiones progresivas en el corazón, siendo necesario cambiar o reparar algunas partes del corazón.

Normalmente, la cirugía cardiaca pediátrica es un procedimiento muy delicado y su complejidad varía de acuerdo con la edad del niño, el historial clínico y el estado de salud general. Así, siempre se recomienda conversar con el pediatra o cardiólogo sobre las expectativas y riesgos de la cirugía.

Después de la cirugía, el niño necesita quedarse internado en el hospital para recuperarse totalmente antes de regresar a casa, lo que puede tardar entre 3 a 4 semanas, dependiendo del tipo de cirugía y de la evolución de cada caso.

Ventilador e tubos

Dreno e tubos

Sonda nasogátrica

Lo que sucede después de la cirugía

Después de la cirugía cardiaca, el niño necesita permanecer internado en una Unidad de Terapia Intensiva (UTI) durante aproximadamente 7 días, para que sea constantemente evaluada, para evitar el desarrollo de complicaciones, como infección o rechazo, por ejemplo.

Durante la internación en la UTI el niño puede estar conectado a varios hilos y tubos para garantizar su bienestar, como:

  • Tubo del ventilador: se inserta en la boca o nariz del niño para ayudar al niño a respirar, pudiendo ser mantenido durante 2 o 3 días;
  • Drenajes en el pecho: son pequeños tubos colocados en el lugar de la cirugía para retirar el exceso de sangre, líquidos y otros residuos de la cirugía, acelerando la recuperación. Se mantienen hasta que el drenaje desaparezca;
  • Cateteres en los brazos: normalmente se mantienen directamente ligados a las venas de los brazos o piernas para permitir la administración de suero u otros medicamentos y pueden ser mantenidos durante toda la internación;
  • Sonda vesical: se coloca para mantener una evaluación frecuente de las características de la orina, permitiendo verificar el funcionamiento de los riñones durante la internación en la UTI. Ver los cuidados que debe tener en: Cómo cuidar a la persona con sonda vesical.
  • Sonda nasogástrica en la nariz: se utiliza durante 2 o 3 días para permitir el vaciado de gases y ácidos del estómago, evitando dolor gástrico.

Durante este período de internación en la UTI, los padres no podrán permanecer todo el día con su hijo debido a su estado frágil, sin embargo, podrán estar presentes para las actividades diarias que el equipo de enfermería encuentre adecuadas, como dar baño o vestir , por ejemplo.

Generalmente, después de la internación en la UTI, el niño es transferido a un servicio de internamiento infantil por 2 semanas, donde podrá iniciar actividades diarias, como comer, jugar o pintar con otros niños, por ejemplo. Durante esta fase se permite que uno de los padres permanezca constantemente con su hijo, incluyendo pasar la noche en el hospital.

Cuando regrese a casa

El regreso a casa se produce alrededor de 3 semanas después de la cirugía, sin embargo, ese tiempo puede ser alterado de acuerdo con los resultados de los exámenes de sangre que el niño hace todos los días o la biopsia cardiaca hecha 2 semanas después de la cirugía.

Para mantener la evaluación regular del niño después del alta del hospital, se pueden marcar varias consultas en el cardiólogo para evaluar los signos vitales, 1 o 2 veces por semana, y hacer un electrocardiograma cada 2 o 3 semanas, por ejemplo.

Cuando vuelva a las actividades normales

Después de volver a casa, es importante mantener el reposo en casa, evitando ir a la escuela durante 3 semanas. Además, también es importante mantener una alimentación equilibrada e iniciar la actividad física gradualmente, de acuerdo con las orientaciones del médico, para mantener el corazón sano y aumentar las probabilidades de éxito a lo largo de los años. Aprenda cómo debe ser la alimentación: Dieta para el corazón.

Cómo evitar las complicaciones después de la cirugía

Los riesgos de la cirugía cardíaca infantil varían según el tipo de cirugía y el problema a tratar, sin embargo, los más importantes durante la recuperación incluyen:

  • Infección: es el principal riesgo asociado a cualquier tipo de la cirugía debido al debilitamiento del sistema inmune, sin embargo, para evitar este riesgo se debe lavar las manos antes de estar con el niño, evitar el contacto con muchos familiares durante el internamiento y ofrecer una máscara de protección para el niño, por ejemplo ;
  • Rechazo: es un problema frecuente en niños que necesitan hacer trasplante de corazón o sustituir partes del corazón por prótesis artificiales, por ejemplo. Para reducir este riesgo se recomienda mantener la ingesta regular de los medicamentos en el horario adecuado;
  • Enfermedad coronaria: es una enfermedad que se puede desarrollar algunos meses después de la cirugía y puede ser evitada con hábitos saludables, como una alimentación equilibrada y ejercicio regular.

Así, durante la recuperación del niño es importante estar atento a signos y síntomas que pueden indicar el desarrollo de complicaciones, como fiebre por encima de 38º, cansancio excesivo, apatía, dificultad para respirar, vómitos o falta de apetito, por ejemplo. En estos casos se recomienda ir inmediatamente al servicio de urgencias para iniciar el tratamiento adecuado.