Remedio casero para las piernas hinchadas
Las piernas hinchadas normalmente son provocadas por la acumulación de líquidos en la región, que surge naturalmente con el envejecimiento, pues las arterias de las piernas van perdiendo su fuerza para empujar la sangre de vuelta al corazón. Así, este problema es más común después de los 30 años, al final del día, especialmente en las personas que se quedan trabajando varias horas de pie o sentadas, por ejemplo.
Una de las mejores maneras de aliviar esta incomodidad es simplemente elevar las piernas al final del día o hacer un masaje en el sentido del corazón, para facilitar la circulación de la sangre y evitar que continúe acumulándose en las piernas. Sin embargo, también hay algunos remedios que, cuando se usan durante el día, permiten reducir el grado de hinchazón al final del día. El té de jengibre es un buen diurético natural que permite aumentar la cantidad de orina eliminada durante el día, disminuyendo la carga de líquidos en el sistema circulatorio. Además, este té también ayuda a diluir la concentración de sodio en el organismo, que es una de las principales causas de la hinchazón en las piernas y los pies.
Ingredientes
4 a 6 rebanadas de 0,5 cm de jengibre;
1 taza de agua;
- Jugo de 1 limón.
- Cómo preparar y tomar
- Pelar las rebanadas de jengibre y cortarlas en pedazos más pequeños. A continuación, agregue el jengibre en una olla con la taza de agua y deje hervir durante 10 minutos. Por último, retire del fuego, deje enfriar y coge.
Este té debe ser bebido 2 a 3 veces durante el día, especialmente por la mañana e inicio de la tarde, para permitir que la eliminación de orina no afecte la hora de dormir.
2. Infusión de perejil
Además de ser un fuerte diurético natural, la perejil también ayuda en la salud de los riñones, permitiendo eliminar más rápidamente el exceso de líquidos y toxinas del organismo. Además, también disminuye la concentración de sal en el cuerpo, lo que impide que los líquidos se acumulen tan rápidamente.
Ingredientes
1 puñado de perejil;
1 taza de agua hirviendo.
- Cómo preparar y tomar
- Corte la perejil en pequeños pedazos y añada en la taza de agua hirviendo, dejando reposar por 5 a 7 minutos. Después, coja las hojas de perejil y deje enfriar.
Idealmente, esta infusión debe ser ingerida tibia, hasta 3 veces al día, para garantizar mejores resultados.
3. Escalada pies con sales de Epsom
Este remedio es muy fácil de preparar y permite aliviar la hinchazón rápidamente al final del día, pudiendo ser hecho antes de un masaje en las piernas, por ejemplo.
Además, las sales de Epsom poseen sulfato de magnesio que es fácilmente absorbido por la piel, facilitando la circulación de la sangre en las piernas y los pies. Por lo tanto, cuando este escalada de pies se hace a menudo ayuda a fortalecer las piernas y reducir la aparición de la hinchazón a lo largo del tiempo.
Ingredientes
½ taza de sales de Epsom;
2 a 3 litros de agua.
- Cómo preparar y usar
- Coloque las sales de Epsom en un tazón de fuente o cubo con agua tibia. La cantidad de agua debe ser suficiente para cubrir los pies y llegar hasta por lo menos el medio de la patrulla. Diluya bien las sales, revolviendo el agua con la mano.
Por último, coloque los pies en el interior del agua durante unos 15 minutos. Repita este proceso hasta 3 veces por semana.
4. Baño de contraste
Quien no tenga la sal Epsom puede optar por este escalón pies, más simple que consiste en un choque térmico que también es muy eficiente. En el vídeo como hacer con la fisioterapeuta Marcelle Pino:
5. Agua de limón
El limón posee excelentes propiedades que ayudan al cuerpo a eliminar el exceso de líquidos y toxinas del cuerpo, permitiendo aliviar el surgimiento de hinchazones. Además, es un potente anti-inflamatorio y, por lo tanto, también puede ayudar a tratar la hinchazón causada por pequeños golpes, por ejemplo.
Ingredientes
Medio limón;
1 taza con agua tibia.
- Cómo preparar y tomar
- Exprima el limón para el interior del vaso con agua, revuelva bien y beba inmediatamente después. Idealmente, el agua con limón debe tomarse en ayunas y alrededor de 15 minutos antes del desayuno, para producir mejor efecto.
Esta mezcla, además de aumentar la cantidad de orina, también puede causar ganas de usar el baño, pues las toxinas generalmente se eliminan a través de las heces.