Síndrome de la silla vacía
El síndrome de la silla vacía es un problema que surge cuando la sella túrcica está llena de líquido cefalorraquídeo debido a una herniación dentro de la silla, lo que lleva a la compresión del tejido hipofisario normal, pudiendo perjudicar la producción de algunas hormonas o el funcionamiento de otras glándulas, como ovarios, testículos o tiroides, por ejemplo.
Generalmente, este síndrome es más frecuente en pacientes con tumor en la hipófisis, que hicieron radioterapia o que fueron sometidos a la cirugía para retirar una parte de la hipófisis, sin embargo, también puede aparecer desde el nacimiento debido a la compresión de la hipófisis por líquido cefalorraquídeo.
El síndrome de la silla vacía raramente causa complicaciones y, por lo tanto, en la mayoría de los casos, no es necesario hacer ningún tipo de tratamiento.
Síntomas del síndrome de la silla vacía
Los síntomas del síndrome de la silla vacía incluyen:
- Dolores de cabeza frecuentes;
- Cambios en la visión;
- Disminución de la libido;
- Exceso de cansancio
Además, también puede surgir disfunción eréctil en el hombre con síndrome de la silla turca vacía, así como ausencia o irregularidad del período menstrual en la mujer. Sin embargo, los síntomas del síndrome de la silla vacía son muy raros, siendo común que el problema sea diagnosticado durante una resonancia magnética o una tomografía de rutina.
Tratamiento para el síndrome de la silla vacía
El tratamiento para el síndrome de la silla vacía debe ser orientado por un endocrinólogo, pero normalmente sólo se inicia cuando el paciente presenta síntomas de reducción de hormonas importantes, por ejemplo. En estos casos se hace reposición hormonal para garantizar los niveles normales de hormona en el organismo.
En los casos más graves, como tumor de la hipófisis, puede ser necesaria cirugía para retirar la parte afectada de la hipófisis y mejorar su funcionamiento.