¿Qué es el síndrome progeroide neonatal y cómo tratar
El síndrome progeroide neonatal, también conocido como síndrome de Wiedemann- Wiedemann-Rautenstrauch, es una enfermedad genética extremadamente rara que provoca una apariencia envejecida del bebé poco después del nacimiento, acompañada de características muy distintas, como rostro triangular y poco desarrollado.
Además, los bebés con este tipo de síndrome, normalmente, también presentan retraso en el desarrollo físico, debilidad muscular, dificultad para mamar y retraso en el desarrollo intelectual. Algunos pueden todavía tener cambios más graves, que impiden la supervivencia después del primer año de edad.
Aunque no se conocen las causas específicas de este síndrome, es posible que sea causada por una mutación genética que se pasa de padres a hijos, sin embargo, las posibilidades de ocurrir son mayores cuando ambos padres tuvieron casos de la enfermedad en la familia.
Principales síntomas y características
La principal característica de este síndrome, además del retraso del desarrollo del feto en el útero, es la apariencia envejecida del bebé que ocurre debido a la falta de la capa de grasa, que generalmente queda debajo de la piel, lo que acaba dejando a la piel piel más fina, frágil, seca y envejecida.
Además, otras características incluyen:
- Rostro triangular con frente saliente;
- Huesos de la cara pequeños y poco desarrollados;
- Falta de cabello, pestañas y cejas;
- Brazos y piernas finos con manos y pies grandes;
- Retraso en el desarrollo físico;
- Retardo en el desarrollo intelectual.
En la mayoría de los casos, es muy difícil diagnosticar el síndrome durante el embarazo y, por lo tanto, normalmente sólo es identificada por el pediatra en los primeros días después del parto, a través de la observación de este tipo de características en el bebé.
Esta enfermedad puede a menudo confundirse con la progeria, una alteración que causa el envejecimiento acelerado del niño y cuyos síntomas normalmente surgen alrededor de los 2 años. Entiende más sobre lo que es la progeria.
Cómo se realiza el tratamiento
No existe cura para el síndrome progeroide neonatal y, por lo tanto, el tratamiento sólo se realiza para corregir algunos cambios, aliviar los síntomas y mejorar el confort y la calidad de vida del bebé.
Así, el tratamiento generalmente es adaptado a cada bebé y puede incluir un equipo de varios profesionales de salud además del pediatra, como neurólogos, cardiólogos o fisioterapeutas, por ejemplo.
En los casos en que el bebé no puede mamar, el pediatra puede aconsejar hacer una cirugía para colocar un pequeño tubo directamente de la piel al estómago, para permitir alimentar adecuadamente al bebé.