La tapa de los ojos debe mantenerse durante el día y sólo puede ser retirada por la noche para que el bebé duerme más cómodo. Si el tapón de ojos no se utiliza siempre durante el día, el cerebro del bebé puede compensar la alteración visual, ignorando la imagen transmitida por el ojo estrábico y provocar la ambliopía, que es la pérdida de visión en uno de los ojos debido a la falta de uso.