Cómo cuidar la piel reseca en el invierno
Durante el invierno es común que la piel quede más reseca. Esto ocurre debido a la disminución de la humedad presente en el aire tanto en el exterior como en el interior de la casa, que deja la piel seca, áspera, irritada y con una ligera sensación de picazón.
Además, el uso de agua más caliente en el baño y de más capas de ropa durante el día también ayuda a irritar y secar más la piel, dejándola muy resaca.
Así, para mantener la piel bien hidratada y evitar los cambios del invierno es muy importante seguir algunos consejos como:
- Evitar usar tacos durante el baño;
- Tomar baño de agua tibia, no muy caliente;
- Colocar el filtro solar, principalmente en la cara, todos los días antes de salir de la casa;
- Ingerir aproximadamente 2 litros de agua por día;
- Aumentar el consumo de frutas ricas en agua, como sandía, melón o naranja, por ejemplo;
- Usar protector labial todos los días y reforzar cuando sea necesario;
- Evitar usar jabón en barra, prefiriendo jabón líquido;
- Limpiar la cara y aplicar crema hidratante todos los días antes de dormir;
- Optar por cremas hidratantes a base de hidroxietil urea, con vitamina C, ácido hialurónico o con oligoelementos;
- Para piel grasa, optar por hidratantes sin aceite, sin aceite;
- Aplicar crema hidratante en los pies antes de dormir y luego calzar calcetines.
Estos cuidados evitan la retirada de la capa de grasa natural de la piel, retiran las impurezas acumuladas durante el día, ayudando a desobstruir los poros, protegen la piel del frío e hidrata la piel, dándole suavidad y elasticidad.
Vea también cómo preparar cremas caseras para mantener su piel siempre suave e hidratada.