es.odysseedubienetre.bePara comprar una carne tanto buena para el consumo como de buena calidad, debe verificarse, aún en el mercado, si la carne sigue algunos principios o normas fáciles de observar, pero que garantizan que la carne puede ser comprada y es segura para ser consumida:
La carne debe estar roja y nunca gris, verdosada o azulada. Estos son signos de que la carne está estropeada;
La carne debe estar almacenada en un refrigerador con una temperatura controlada entre 0 a 3 grados, para garantizar que la carne no estropea, aunque esté dentro de la fecha de caducidad indicada en el embalaje. Esta temperatura debe ser visible en el termómetro del expositor del mercado.
Al presionar con el dedo, la carne debe volver al estado inicial rápidamente, desapareciendo la marca del dedo. Las texturas viscosas tampoco son deseables e indican una mala carne para el consumo;
La carne no debe tener un olor intenso. Cualquier aroma desagradable puede indicar que la carne ya está estropeando y no se debe consumir.
En el caso de la carne molida, para asegurarse de que no está mezclada con otros ingredientes como huesos, grasas y hasta cartón, lo más indicado es observar la carne siendo molida en el momento de la compra. Los productos industrializados como salchicha, hamburguesa o embutidos, donde se utilizan ingredientes de menor calidad, lo importante es garantizar que se consumen dentro del plazo de validez, observando los mismos principios para elegir la carne.
En casa la carne debe ser mantenida en la nevera, en el estante superior por un máximo de 2 o 3 días y en el congelador por un plazo medio que ronda los 4 meses. Escurrir el agua del embalaje antes de guardar ayuda para garantizar que la carne sigue siendo buena para el consumo y sabrosa.
Otra sugerencia importante es que la carne, tanto refrigerada y procesada, debe ser comprada por último en el super mercado y debe ser la primera a ser guardada en la heladera o volver al congelador para garantizar que no hay variación de temperatura que pueda acelerar el proceso de putrefacción.
Antes de preparar la carne congelada, el mejor método es descongelar en la nevera durante la noche, por ejemplo. Pero en el caso de los alimentos industrializados y procesados como salchichas, hamburguesas, embutidos en general y hasta carnes ya molidas, además de verificar siempre la fecha y el plazo de validez, que está en el fondo o en la tapa del embalaje, es indispensable leer los ingredientes de las etiquetas de dichos alimentos.
En el caso del pollo, los signos que deben observarse son los mismos que los usados para la carne, observando una carne rosada e íntegra que no cede a la presión del dedo y tampoco es viscosa ni tiene aroma desagradable, por puede ser mantenida ne nevera por 3 a 4 días, un día más que la carne roja en promedio.
