Para que sirve la biopsia del hígado
Este procedimiento, también llamado biopsia hepática, se realiza en el hospital, pues la retirada de la muestra del hígado se realiza con una aguja especial, en un procedimiento que es similar a una pequeña cirugía y, aunque raros, pueden haber algunos riesgos, como sangrado.
Generalmente la persona no queda internada y vuelve a casa el mismo día, aunque es necesario ir al hospital acompañado, porque es necesario reposo y no podrá conducir después de la biopsia.
Cuando se indica
La biopsia hepática sirve para analizar cambios en el hígado, para definir el diagnóstico y poder planificar mejor el tratamiento. Las principales indicaciones incluyen:
Evaluar hepatitis virales B y C, en caso de dudas sobre el diagnóstico o gravedad de la enfermedad, pudiendo también identificar la intensidad del daño al hígado
- Evaluar enfermedades que causan depósitos en el hígado, como Hemocromatosis, que causa depósito de hierro, o enfermedad de Wilson, que causa depósito de cobre, por ejemplo;
- Identificar la causa de nódulos hepáticos;
- Buscar la causa de una hepatitis, cirrosis o insuficiencia del hígado;
- Analizar la eficacia del tratamiento para el hígado.
- Evaluar la presencia de células cancerígenas;
- Buscar la causa de una colestasis o cambios en las vías biliares;
- Identificar una enfermedad sistémica que esté afectando el hígado o que cause fiebre de origen no esclarecida;
- Analizar el hígado de un posible donante de trasplante o incluso la sospechosa de rechazo u otra complicación tras trasplante del hígado.
- Este procedimiento sólo se realiza por indicación médica y, generalmente, sólo cuando otros exámenes que evalúan la presencia de lesiones y el funcionamiento del hígado no han podido proporcionar la información necesaria, como ultrasonido, tomografía, dosificación de enzimas hepáticas (AST, ALT) , bilirrubinas o albúmina, por ejemplo. Más información sobre los exámenes que evalúan el hígado.
Como se realiza la biopsia
Para biopsiar el hígado, generalmente se utiliza una aguja especialmente indicada para estos casos, para intentar remover una muestra como el mínimo de lesión posible para el órgano.
Algunas técnicas diferentes pueden ser utilizadas por el médico, y la más común es la biopsia percutánea del hígado, en la que la aguja se inserta a través de la piel hasta el hígado, que se encuentra en el lado derecho del abdomen. El procedimiento se debe hacer con anestesia o sedación y, a pesar de ser incómodo, este no es un examen que causa mucho dolor.
En general, exámenes como la ecografía o la tomografía computarizada se utilizan como guía para localizar el área que se desea alcanzar, de donde será recolectada la muestra. El médico retira cerca de 3 muestras y el procedimiento tarda alrededor de media hora, dependiendo de cada caso. A continuación, las muestras se analizar en el microscopio para evaluar la presencia de cambios en las células.
Otras formas de obtener acceso al hígado para la biopsia, es insertando la aguja a través de la vena yugular y alcanzar el hígado por la circulación, llamada de vía transjugular, o, también durante una cirugía laparoscópica o abierta, pero son formas menos comunes.
Cuál es la preparación necesaria
Antes de realizar la biopsia del hígado, el médico puede recomendar la realización de ayuno, de aproximadamente 6 a 8 horas. Además, se aconseja suspender el uso de medicamentos que pueden interferir con la coagulación de la sangre durante aproximadamente una semana, como antiinflamatorios, anticoagulantes o AAS, por ejemplo, qué se debe hacer de acuerdo con la orientación médica.
Como es la Recuperación
Después de la biopsia del hígado, la persona necesita permanecer en el hospital en observación por cerca de 4 horas. El médico también puede comprobar la presión arterial y otros datos vitales para saber si puede haber alguna complicación y si es seguro dar alta, pero por lo general, las personas que están bien controladas pueden ir a casa el mismo día.
La persona debe salir del hospital con un vendaje en la parte lateral del abdomen que debe ser retirado después de 2 días, en casa, después de una cicatrización segura.
Antes de retirar el vendaje se debe tener cuidado de no mojar la gasa y verificar si está siempre limpio, y si hay la presencia de sangrados, pus en la herida, fiebre, además de mareo, desmayos o dolor intenso, es indicado ir al médico para que se haga una evaluación.
Para aliviar el dolor y la incomodidad, el médico puede recomendar que tome un analgésico, y no se recomienda hacer esfuerzos durante 24 horas después del procedimiento.
Posibles complicaciones
A pesar de que la biopsia del hígado es un procedimiento seguro y raramente existen complicaciones, es posible que se produzca hemorragia, perforación del pulmón o de la vesícula biliar e infección en el lugar de la inserción de la aguja.