Lo que puede causar el Nódulo en el Hígado y cómo identificar

En la mayoría de los casos, el nódulo en el hígado es benigno y no es grave, siendo común que se descubran accidentalmente en exámenes de rutina. Generalmente, no causan síntomas, aunque pueden provocar dolor abdominal y alteraciones digestivas cuando crecen demasiado o sufren alguna ruptura.

Los tipos más comunes de nódulo hepático son el hemangioma, adenoma hepatocelular e hiperplasia nodular focal, y la principal forma de tratamiento es el acompañamiento regular con exámenes, como tomografía o resonancia magnética. También pueden ser retirados a través de cirugía, indicada por el hepatólogo, si provoquen síntomas, crezcan demasiado o adquieren características sospechosas de malignidad.

Los quistes también suelen ser lesiones benignas, sin embargo, tienen características diferentes, pues en vez de ser tumores, son una cavidad llenada por líquido, como especies de bolsas. Más información sobre lo que es el quiste hepático y cuando puede ser peligroso.

1. Hemangioma Hepático

Son los nódulos benignos del hígado más frecuentes, y son especies de malformaciones de los vasos sanguíneos, ya que están compuestos por un conjunto de vasos sanguíneos recubiertos por una capa.

Los hemangiomas suelen ser detectados por examen de ultrasonido, sin embargo, el médico podrá solicitar una tomografía o resonancia magnética para evaluar mejor sus características. Generalmente, no causan síntomas, excepto cuando crecen demasiado y comprimen los órganos alrededor o sufren algún tipo de ruptura o sangrado.

• ¿Cuál es la causa: sus causas no están claras, pero puede tener asociación con la genética y con la reposición de hormonas.
• Cómo tratar: es orientado por el hepatólogo, pudiendo ser indicado acompañamiento con exámenes cada 6 meses a 1 año, especialmente en los casos que miden más de 5 cm. Si crecen demasiado, presentan características sospechosas de malignidad al examen o sufren ruptura, pueden ser removidos quirúrgicamente.

Lea más sobre lo que es el hemangioma, cómo confirmar y formas de tratamiento.

2. Adenoma Hepatocelular

El adenoma es un tipo de tumor benigno del hígado, más frecuentes en mujeres de entre 20 y 50 años de edad. No suele provocar ningún síntoma, pudiendo ser descubierto por accidente en ultrasonido hecho por otras causas, sin embargo, puede provocar dolor abdominal en las regiones correspondientes al hígado y el estómago.

En algunos casos, el adenoma puede romperse y causar sangrado. Además, raramente también puede evolucionar para el cáncer, por lo que si se detecta, siempre debe evaluarse con resonancia magnética. En caso de duda, el hepatólogo también podrá indicar la realización de una biopsia.

• ¿Cuál es la causa: a menudo se relacionan con el uso de anticonceptivos con estrógenos, el uso de esteroides anabolizantes, la obesidad y las enfermedades genéticas, como las que causan el depósito de glucógeno, por ejemplo.
• Cómo tratar: el hepatólogo puede indicar el seguimiento semestral con exámenes. Sin embargo, en algunos casos, puede ser indicada la remoción por cirugía, como en los casos en que provoquen síntomas, crezcan demasiado o tengan características sospechosas de malignidad. En mujeres en edad fértil, especialmente que tengan nódulo mayor de 5 cm, también está indicada la cirugía, pues durante el embarazo el nódulo tiende a aumentar.

Identifique las causas del tumor en el hígado y cuando puede ser maligno.

3. Hiperplasia nodular focal

Es un tipo de nódulo hepático también frecuente, más común en mujeres entre 20 a 60 años. En la gran mayoría de las veces no provoca síntomas, y no suele provocar complicaciones o riesgo de convertirse en cáncer.

La hiperplasia nodular focal puede ser confundida con otros tipos de nódulos en el ultrasonido, por lo que siempre debe ser confirmado en exámenes como tomografía o resonancia magnética. Además, también puede surgir en conjunto con hemangioma o adenoma.

• ¿Cuál es la causa: su causa no está bien aclarada, y se cree que puede estar relacionada con cambios en el flujo sanguíneo. A pesar de ser más común en mujeres jóvenes, no es provocado por el uso de anticonceptivos, aunque éstos pueden favorecer el crecimiento del nódulo.
• Cómo tratar: en general, sólo necesita un seguimiento con exámenes, cada 6 meses a 2 años. La remoción con cirugía puede ser indicada en casos en que crece demasiado, provoca síntomas o cuando presenta características de otros tipos de tumores.