El síndrome hepatopulmonar
El síndrome hepatopulmonar se caracteriza por una dilatación de las arterias y venas de los pulmones que ocurren en personas con presión arterial alta en la vena porta del hígado. Debido a la extensión de las arterias de los pulmones, aumenta el ritmo cardíaco haciendo que la sangre que se bombea al cuerpo no tiene suficiente oxígeno.
El tratamiento de este síndrome consiste en la oxigenoterapia, reducción en la presión de la vena porta y en casos más graves trasplante de hígado.
¿Cuáles son los síntomas? Los síntomas que pueden ocurrir en personas con este síndrome son falta de aire cuando se está de pie o sentado. Además, la mayoría de las personas con síndrome hepatopulmonar también presentan síntomas de enfermedad hepática crónica, que pueden ser variados, dependiendo del problema que la origina.
Lo que causa el síndrome hepatopulmonar
En condiciones normales, la endotelina 1 producida por el hígado tiene la función de regular el tono vascular pulmonar y cuando se une a los recetores localizados en el tejido del músculo liso vascular a endotelina 1 produce vasoconstricción. Sin embargo, cuando se une a los recetores localizados en el endotelio vascular pulmonar, produce vasodilatación debido a la síntesis de oxido nítrico. Así, la endotelina 1 equilibra su efecto vasoconstrictor y vasodilatador y ayuda a mantener la ventilación pulmonar dentro de los parámetros normales.
Sin embargo, cuando ocurre daño hepático, la endotelina llega a la circulación pulmonar e interactúa preferentemente con el endotelio vascular pulmonar, promoviendo vasodilatación pulmonar. Además, en la cirrosis hay aumento de los niveles del factor de necrosis tumoral alfa, el cual contribuye a la acumulación de macrófagos en el lumen de los vasos pulmonares que estimulan la producción de óxido nítrico, desencadenando también vasodilatación pulmonar, dificultando la oxigenación de toda la sangre bombeada para el pulmón.
Como se realiza el diagnóstico
El diagnóstico consiste en una evaluación médica y realización de exámenes como ecocardiografía con contraste, centellografía nuclear del pulmón, pruebas de función pulmonar.
Además, el médico también puede medir la cantidad de oxígeno en la sangre a través de oximetría. Ver lo que es oximetría y cómo se mide.
En qué consiste el tratamiento
El principal tratamiento para el síndrome hepatopulmonar es la administración de oxígeno suplementario para aliviar la falta de aire, sin embargo a lo largo del tiempo la necesidad de suplementación de oxígeno puede aumentar.
Actualmente, ninguna intervención farmacológica mostró alterar significativamente y mejorar la oxigenación arterial. Así, el trasplante hepático es la única opción terapéutica eficaz para la resolución de este problema.