¿Qué es y cómo funciona la vacuna contra el aborto
Generalmente, este tipo de aborto es causado por una respuesta del sistema inmune de la mujer que reacciona al bebé como si fuera un cuerpo extraño que debe ser eliminado, pues contiene células del padre, que son extrañas para el organismo de la madre, llevando al aborto sin causa aparente.
Cómo funciona la vacuna
La mujer recibe una vacuna con los glóbulos blancos del padre para que sus células de defensa dejen de identificar las células del padre como una sustancia extraña durante el embarazo, evitando así que el bebé vuelva a ser tratado como si fuera un cuerpo extraño o una enfermedad que debe ser combatida, disminuyendo el riesgo de aborto.
La vacuna debe prepararse en el laboratorio específicamente para cada pareja, pues es necesario retirar cerca de 80 ml de sangre paterno para obtener las células blancas, que luego se mezclan en suero fisiológico e inyectadas en la futura mamá.
Para que los resultados sean más positivos, se deben hacer 2 dosis de esta vacuna antes de intentar quedar embarazada y, a continuación, es importante realizar un examen de sangre en el cual el obstetra es capaz de evaluar si el cuerpo de la mujer todavía reacciona a las células del padre de forma negativa o si puede tratar de quedar embarazada de nuevo.
Como la vacuna puede disminuir el riesgo de aborto
En el mayor pate de las veces, el cuerpo de la embarazada es capaz de ignorar la alerta del sistema inmune contra el "cuerpo extraño" que es en realidad el bebé, produciendo el HLA-G, una sustancia que impide el proceso de eliminación del feto y permite que el embarazo se desarrolle normalmente. Sin embargo, algunas mujeres pueden presentar dificultad para producir el HLA-G y por eso el sistema inmune continúa tratando de proteger el cuerpo de la madre, atacando al bebé para eliminarlo del útero. Esto sucede porque el cuerpo humano está programado para eliminar cualquier sustancia extraña, para protegerse contra las gripes, los resfriados y otras enfermedades.
Así, este tipo de vacuna puede ser una buena forma de tratamiento para disminuir el riesgo de aborto en mujeres que pierden a sus bebés repetidamente, sin diagnóstico de infertilidad que justifique.