Entender por qué las embarazadas son más sensibles
Durante el embarazo, las mujeres son más sensibles debido a las alteraciones hormonales que ocurren a lo largo de la gestación, que son aproximadamente 30 veces mayores que en el ciclo menstrual, cuando ocurre la TPM.
Además, existe tanto la alegría como la presión de la responsabilidad por llevar una vida dentro del útero y ser responsable por ella durante toda la vida, lo que causa cambios en la rutina diaria, en la planificación del trabajo y en el presupuesto de la familia. Ver todos los cambios en el primer trimestre.
Cambios a lo largo de la gestación
El primer trimestre es el más difícil y con más oscilaciones de humor, pues es el período en que el cambio hormonal es más drástico, además de ser cuando la mujer tiene que acostumbrarse a la idea del embarazo y se adapte a la nueva vida.
A partir de la semana 20, las hormonas comienzan a estabilizarse y el humor y la disposición de la mujer mejoran. Sin embargo, en el tercer trimestre las hormonas alcanzan el pico máximo, acompañados por la ansiedad con el parto y los preparativos para recibir al bebé.
Además, el crecimiento rápido de la barriga trae problemas como dolor de espalda, dificultades para dormir y cansancio constante, haciendo que el estrés y la irritabilidad sean mayores. Sepa cómo aliviar las 8 incómodas más comunes del inicio del embarazo.
Lo que el bebé siente
En general, el bebé no es afectado por las oscilaciones de humor de la madre en el embarazo, pero si el estrés de la mujer es muy intenso, puede causar alteraciones en el sistema inmunológico y disminuir la protección del bebé a infecciones y enfermedades que haya tenido durante ese período.
Además, el exceso de estrés al final de la gestación hace que los músculos queden siempre contraídos, lo que puede favorecer el parto prematuro. Sin embargo, estos casos son raros y sólo afecta a las mujeres que sufren problemas graves, como agresión física del compañero.
Como el compañero puede ayudar
Para ayudar en ese período, el compañero necesita ser paciente, atento y cariño, acompañando toda la evolución del embarazo de cerca, para ser capaz de percibir los cambios sufridos por la mujer y dar el apoyo necesario.
Así, es importante que el compañero vaya a las consultas de prenatal, ayude en los preparativos en casa e invite a la mujer a hacer programas a dos como ir al cine, pasear en el parque o visitar amigos, actividades que ayudan a mantener la salud del niño, relaciones de pareja. Sin embargo, si las oscilaciones de humor son muy fuertes y la mujer comienza a aislarse y perder la voluntad de hacer actividades comunes, puede ser signo de depresión en el embarazo.