Tratamiento para el feocromocitoma
El tratamiento para el feocromatismo se realiza en la mayoría de los casos con cirugía para tratar de eliminar el máximo de tumor de la glándula adrenal afectada. Sin embargo, antes de ser posible hacer la cirugía, el médico necesita estabilizar los síntomas, especialmente la presión arterial alta, para evitar complicaciones.
De esta forma, el tratamiento puede iniciarse con el uso de:
- Bloqueadores alfa, como Doxazosina o Terazosina: mejoran la circulación de la sangre y reducen la presión alta;
- Bloqueadores beta, como Atenolol o Metoprolol: disminuyen la frecuencia cardíaca y mantienen la presión arterial controlada;
- Otros medicamentos para la presión alta, como Captopril o Amlodipino: se utilizan cuando la presión arterial no disminuye sólo con el uso de los bloqueadores alfa o beta.
Estos medicamentos generalmente se utilizan durante un período de unos 10 días antes de la cirugía.
Cómo se realiza la cirugía
La cirugía para feocromocitoma se realiza bajo anestesia general y, en la mayoría de los casos, el médico opta por retirar toda la glándula suprarrenal afectada, para reducir el riesgo de que el tumor vuelva a aparecer. Sin embargo, si la otra glándula también está afectada o si ya se retira antes, el médico retira sólo la porción afectada de la glándula, manteniendo la parte sana.
Generalmente, la glándula sana es capaz de mantener su función y producir las hormonas necesarias para el organismo. Sin embargo, cuando esta producción queda comprometida, el médico puede recetar la reposición hormonal, que puede ser hecha por toda la vida.
Tratamiento para el feocromacitoma maligno
Aunque es bastante raro, el feocromocitoma también puede ser un tumor maligno y, en estos casos, después de la cirugía puede ser necesario hacer quimioterapia o radioterapia para eliminar todas las células malignas o mestástasis, dependiendo del grado de evolución del tumor .
Señales de mejora
Las primeras señales de mejora surgen cerca de 1 semana después de comenzar el tratamiento con los medicamentos e incluyen la disminución de la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Después de la cirugía, todos los síntomas desaparecen completamente. Sin embargo, en el caso de cáncer maligno todavía se pueden mantener algunos síntomas o incluso aparecer signos de cáncer con metástasis como dolor sin causa aparente o pérdida de peso, por ejemplo.
Signos de empeoramiento
Los signos de empeoramiento son más frecuentes mientras el tratamiento no se inicia y pueden incluir un aumento de las crisis de temblor, dolor de cabeza intenso y falta de aire, así como un aumento pronunciado de la presión arterial y la frecuencia cardíaca.