Fisioterapia para Alzheimer
El tratamiento fisioterapéutico para el Alzheimer debe ser realizado por lo menos 2 veces por semana en pacientes que se encuentran en una fase temprana de la enfermedad y que presentan síntomas como dificultad para caminar o equilibrar, por ejemplo, ayudando a retardar el avance de la enfermedad y manteniendo la autonomía del paciente por un mayor período de tiempo.
Sin embargo, cuando el paciente ya está en una fase avanzada y, se encuentra acamado, es importante hacer ejercicios de fisioterapia diariamente con un terapeuta, para evitar la atrofia muscular y mantener la amplitud de las articulaciones, para tener bienestar y confort . Lea más sobre la enfermedad en: Síntomas de Alzheimer.
Beneficios de la fisioterapia en el paciente con Alzheimer
El tratamiento de fisioterapia para ancianos con Alzheimer tiene como objetivos:
- Ayudar al individuo a moverse más libremente, manteniendo cierta autonomía y movilidad para moverse en la cama, sentarse o caminar, por ejemplo ;
- Evitar que los músculos queden atrapados y atrofiados, que traen dolores; Permitir la amplitud de las articulaciones
- , para realizar las tareas del día a día;Evitar caídas y fracturas;
- Evitar dolor en los músculos,
- huesos y tendones, que causan molestias y malestar. De esta forma, la fisioterapia permite que el individuo mantenga cierta autonomía, logrando realizar sus tareas del día a día solo o con el mínimo de ayuda posible.
Además, si la capacidad para moverse y movilizarse es por el mayor tiempo posible, ayuda a retardar problemas comunes en la enfermedad de Alzheimer, como estreñimiento, desarrollo de infeciones respiratorias o escaras.
Ejercicios para Alzheimer
Los portadores de Alzheimer, deben hacer ejercicios sencillos y de fácil comprensión para que el paciente consiga comprender y, que deben ser similares a las actividades del día a día, para aumentar al mismo tiempo la actividad intelectual y motora.
Los ejercicios físicos pueden ser hechos por el portador de la enfermedad o con ayuda de un fisioterapeuta y, éstos deben ser realizados en breves períodos de tiempo, varias veces al día, para evitar el agotamiento y el desinterés por la actividad.
Algunos buenos ejemplos de ejercicios simples para
personas con Alzheimer en la fase inicial o intermedia de la enfermedad incluyen: Caminar por la casa o bailar;
- Colocar una bola de plástico sobre la cabeza e intentar equilibrar;
- Entrenar el cepillado de los dientes y peinar el pelo;
- Apretar botones de la blusa;
- Estar en un pie solo y caminar de lado.
- Los casos más recientes de Alzheimer, pueden beneficiarse de ejercicios en grupo con pesos y bolas, por ejemplo, o incluso hacer natación o hidroginástica y estiramientos musculares.
Fisioterapia para pacientes con Alzheimer avanzado
Cuando el paciente con la enfermedad de Alzheimer ya está en un estadio avanzado y, se encuentra acamado o tiene dificultad en equilibrarse sentado debe hacer fisioterapia todos los días con un fisioterapeuta, para evitar que el enfermo pierda masa muscular y quede con los músculos y las articulaciones atrofiadas, que traen dolor e incomodidad.
El fisioterapeuta debe hacer ejecuciones simples de estiramiento, pidiendo siempre que posible colaboración del paciente.