Remedios caseros para eliminar el Ojo de Pez
Para complementar el tratamiento para ojo de pescado que debe ser dirigido por el podologista o dermatólogo, usted puede usar plantas medicinales como ajo y acacia porque ellas poseen las propiedades medicinales necesarias para remover esta verruga plantar y regenerar la piel, aliviando así el dolor y la molestia causada.
El ojo de pescado, como se llama popularmente, es un tipo de verruga que afecta a la planta de los pies, que es causada por la presencia del virus del VPH en la piel. Cuando no se trata esta verruga puede aumentar de tamaño y puede extenderse, afectando otras áreas del cuerpo, y por eso es común que la persona tenga más de una verruga plantar.
Su tratamiento clínico se realiza con lociones que retiran la capa más externa de la piel, y eliminan el virus, trayendo alivio de los síntomas y regenerando complemente la piel de los pies. Más información sobre este tratamiento.
Vea cómo complementar el tratamiento en casa.
Cataplasma de Ajo y Aspirina para eliminar la lesión
El ajo tiene acción antibacteriana y antiséptica que ayuda a eliminar el virus HPV que se encuentra presente en el ojo de pescado.
Ingrediente
- 1 diente de ajo
- 1 cuchara de aceite
- 1 aspirina
Modo de preparación
Amasar el diente de ajo y la aspirina con una cuchara y mezclar con el aceite. A continuación se debe aplicar directamente esta solución casera sobre la verruga plantar y cubrir con un band-aid dejando actuar durante toda la noche.
Aceite esencial de Acacia para regenerar la piel
El aceite esencial de acacia posee propiedades anti-inflamatorias y cicatrizantes que ayudan a tratar el ojo de pescado, siendo útil para mantener la piel más suave e hidratada y sin las pequeñas lesiones de piel que quedan en torno a la verruga.
Ingrediente
- Aceite esencial de acacia
Modo de uso
Basta con aplicar unas gotas de aceite esencial de acacia, en el lugar de la herida, con ayuda de un pedazo de algodón, de 3 a 4 veces al día. Después es importante proteger la región con una banda-ayuda y evitar revolver constantemente en la lesión para evitar el riesgo de infección.