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¿Qué es el shock neurogénico y cómo tratar

El choque neurogénico ocurre cuando existe una falla de comunicación entre el cerebro y el cuerpo, haciendo que los vasos sanguíneos pierdan su tono y dilaten, dificultando la circulación de la sangre por el cuerpo. Cuando esto sucede, los órganos dejan de recibir el oxígeno necesario y, por eso, dejan de funcionar, creando una situación que pone la vida en riesgo.

Este tipo de choque es más frecuente en accidentes de tráfico y caídas, por ejemplo, cuando hay una lesión de la médula espinal, también puede surgir debido a problemas en el cerebro, por ejemplo.

Así, si hay sospechas de shock neurogénico es muy importante ir inmediatamente al servicio de urgencias o llamar a la ayuda médica, conectando el 192, para que pueda iniciarse el tratamiento adecuado, que normalmente se hace en la UTI con medicamentos directamente en la vena.

O que é o choque neurogênico e como tratar

Principales signos y síntomas

Los dos primeros síntomas más importantes del choque neurogénico son la disminución rápida de la presión arterial y la ralentización del ritmo cardiaco. Sin embargo, también son frecuentes otras señales como:

  • Disminución de la temperatura corporal, por debajo de 35,5ºC;
  • Respiración rápida y superficial;
  • Piel fría y azulada;
  • Mareos y sensación de desmayo;
  • Exceso de sudor;
  • Dolor en el pecho.

La gravedad de los síntomas normalmente aumenta de acuerdo con la lesión que llevó al surgimiento del choque, siendo que, en el caso de leones en la columna, cuanto más alta, más severos pueden ser los síntomas.

Existen otros tipos de shock que también pueden causar este tipo de síntomas, como es el caso del shock séptico o del shock cardiogénico. Sin embargo, en cualquiera de los casos, es siempre importante ir el más rápido al hospital para iniciar el tratamiento.

Posibles causas del choque neurogénico

La principal causa de shock neurogénico es el acontecimiento de lesiones en la columna, debido a golpes fuertes en la espalda o accidentes de tránsito, por ejemplo.

Sin embargo, la utilización de una técnica incorrecta para hacer anestesia peridural en el hospital o el uso de algunas drogas o medicamentos que afectan el sistema nervioso también pueden ser causas de choque neurogénico.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento para el choque neurogénico debe iniciarse lo más rápido posible para evitar complicaciones graves que ponen en riesgo la vida. De esta forma, el tratamiento puede iniciarse inmediatamente en el servicio de urgencias, pero luego debe continuarse en la UTI para mantener una evaluación constante de los signos vitales. Algunas formas de tratamiento incluyen:

  • Inmovilización: se utiliza en los casos en que ocurre una lesión en la columna, para evitar que se agrave con los movimientos;
  • Uso de suero directamente en la vena: permite aumentar la cantidad de líquidos en el cuerpo y regular la presión arterial;
  • Administración de atropina: un remedio que aumenta los latidos del corazón, si el corazón ha sido afectado;
  • Uso de epinefrina o efedrina: junto con el suero, ayudan a regular la presión arterial;
  • Uso de corticoides, como metilprednisolona: ayudan a disminuir las complicaciones de lesiones neurológicas.

Además, si se ha producido un accidente, también puede ser necesaria una cirugía para corregir las lesiones provocadas. De esta forma, el tratamiento puede durar entre 1 semana hasta varios meses, dependiendo del tipo de lesión y de la gravedad de la situación. Después de estabilización de los signos vitales y recuperación del choque, generalmente es necesario hacer sesiones de fisioterapia para recuperar alguna de la fuerza muscular o para adaptarse a la realización de las actividades diarias.