es.odysseedubienetre.beEl consumo frecuente de comida preparada congelada, como la pizza, lasaña, nuggets y hamburguesas puede traer diversos maleficios para la salud, como aumento de la presión arterial, diabetes y colesterol alto.
Esto sucede porque estos alimentos son ricos en sal, azúcar, grasa saturada y sustancias químicas para realzar el sabor y conservar el alimento por más tiempo. A continuación se presentan los principales problemas que estos productos traen para la salud.
En general, la comida preparada congelada es muy rica en calorías, llevando al aumento del peso y al descontrol de la cantidad de grasa corporal. Incluso pequeñas porciones de este tipo de comida tienen gran concentración calórica, y no trae saciedad al intestino, lo que lleva al individuo a comer más y más veces.
Los alimentos listos como lasaña, nuggets, sopas en polvo, macarrones instantáneos y condimentos en cubos son ricos en sodio, un compuesto de la sal que es el principal responsable del aumento de la presión arterial.
Una porción de 300 g de lasaña, por ejemplo, tiene más del 30% de toda la sal que un adulto puede comer por día, mientras que un cubo de condimento de carne tiene el doble de sal que un adulto puede comer todo el día. Así, es fácil exagerar en la sal al consumir productos industrializados, lo que aumenta el riesgo de desarrollar presión alta.
Además de la sal, estos productos son ricos en grasas saturadas, que la principal responsable de aumentar el colesterol malo y reducir el colesterol bueno. Con ello, se aumenta el riesgo de desarrollar problemas como aterosclerosis, que es la obstrucción de los vasos sanguíneos por placas de grasa, grasa en el hígado, infarto y accidente cerebrovascular.
Otra característica común de las comidas listas es que son ricas en azúcar, ingrediente muy utilizado para mejorar el sabor de las preparaciones y aumentar y dejar el consumidor adicto al sabor dulce.
Sin embargo, el consumo excesivo de azúcar aumenta el riesgo de desarrollar diabetes, especialmente en las personas con antecedentes familiares de esta enfermedad.
Debido al alto contenido de sustancias químicas, como conservantes, saborizantes, colorantes y realzadores de sabor, el consumo frecuente de estos alimentos también puede conducir a problemas de salud como irritación en el estómago, cáncer de colon, dolor de colon cabeza, hormigueo, piedras en los riñones, náuseas y reducción de la absorción de vitaminas en el intestino.
Además, aditivos alimentarios como el glutamato monosódico dejan el paladar viciado en el sabor artificial de la comida, lo que causa el aumento del consumo de ese tipo de producto. Los aditivos químicos son más peligrosos para la salud y en qué alimentos están.
Para reducir el consumo de industrializados y los peligros que traen para la salud, se debe preferir consumir alimentos en su forma natural, como arroz, frijoles, carnes frescas, leche, queso, yogurt, frutas y verduras. Además, es importante usar condimentos naturales para dar sabor a la comida, como ajo, cebolla, albahaca, pimienta, perejil y orégano.
Los productos industrializados deben ser evitados, especialmente para niños, ancianos y personas con problemas de salud como diabetes, hipertensión y colesterol alto. De esta forma, es posible tener una alimentación más natural y con menos grasa y aditivos químicos, lo que también ayuda en el control del peso y en la prevención de diversas enfermedades.
