Puede surgir por diversas causas, como una alimentación pobre en vitaminas, sangrados, mal funcionamiento de la médula ósea, enfermedades autoinmunes o por la existencia de enfermedades crónicas, como artritis o insuficiencia renal, por ejemplo.
Se detecta la anemia a través del hemograma que identifica los niveles de hemoglobina en la sangre que, preferentemente, deben estar por encima de 13 g% en hombres, 12 g% en mujeres y 11 g% en gestantes a partir del segundo trimestre, pues en el período de la sangre tiende a ser más diluido. Más información sobre los exámenes que confirman la anemia.
La anemia puede ser leve o incluso profunda cuando la dosis de hemoglobina está por debajo del 7%, y esto no sólo depende de la causa, sino también de la gravedad de la enfermedad y de la respuesta del organismo de cada persona.
Principales causas de anemia
1. Carencia de vitaminas
Anemia por falta de hierro en el organismo
Vea el vídeo siguiente y echa un vistazo a las orientaciones de la nutricionista Tatiana Zanin sobre qué comer en caso de anemia:
2. Defectos en la médula ósea
Lea más sobre lo que es y qué hacer en caso de anemia aplásica.
3. Sangrado
Las hemorragias son graves ya que la pérdida de sangre representa la pérdida de oxígeno y los nutrientes a los órganos del cuerpo.
En algunos casos, los sangrados no son visibles, siendo necesaria la realización de exámenes como endoscopia o colonoscopia para identificar. Sepa lo que puede causar sangre en las heces.
4. Enfermedades genéticas
Las enfermedades hereditarias, que se pasan a través del ADN, pueden provocar cambios en la producción de la hemoglobina, ya sea en su cantidad o en su calidad. En general, estas alteraciones resultan en la destrucción de los hematíes.
Anemia falciforme
: es una enfermedad genética y hereditaria en la que el organismo produce hemoglobinas con estructura alterada, por lo que origina glóbulos rojos defectuosos, que pueden tomar forma de hoz, dificultando su capacidad para transportar oxígeno en la sangre. Compruebe los síntomas y el tratamiento de la anemia de células falciformes.
La anemia hemolítica autoinmune (AHAI) es una enfermedad de causa inmunológica, que surge cuando el organismo produce anticuerpos que atacan los propios glóbulos rojos.
El tratamiento consiste principalmente en el uso de medicamentos para regularizar el sistema inmune, como los corticoides y los inmunosupresores. Más información sobre cómo identificar y tratar la anemia hemolítica autoinmune. 6. Enfermedades crónicas
Las enfermedades crónicas, que son aquellas que pueden durar muchos meses o años en actividad, como la tuberculosis, la artritis reumatoide, la fiebre reumática, la osteeomielitis, la enfermedad de Crohn o mieloma múltiple, por ejemplo, causan una reacción inflamatoria en el organismo que puede resultar en anemia debido a la muerte prematura y cambios en la producción de los glóbulos rojos.
Además, la enfermedad que provoca cambios en las hormonas que estimulan la producción de los glóbulos rojos también pueden ser la causa de la anemia, incluyendo hipotiroidismo, reducción de andrógenos o caída de los niveles de la hormona eritropoyetina, que puede estar reducida en enfermedades renales.
7. Otras causas
La anemia también puede surgir debido a infecciones, como ocurre en infecciones virales o bacterianas, así como puede surgir debido al uso de ciertos medicamentos, como antiinflamatorios, antibióticos o anticoagulantes, o por la acción de sustancias como alcohol en exceso o bencenos, por ejemplo.
El embarazo puede provocar anemia, básicamente debido a la ganancia de peso y el aumento de líquidos en la circulación, que diluye la sangre. Ver también: Anemia en el Embarazo.
El anciano tiene más probabilidades de desarrollar anemia, principalmente debido a alteraciones en la alimentación, que puede estar en falta de nutrientes, así como por ser más comunes en los ancianos las enfermedades crónicas y también la presencia de sangrados debidos a las úlceras digestivas, a las varices intestinales o al cáncer, por ejemplo.
Además, existen alteraciones que ocurren en el organismo con el avance de la edad, que incluyen menor actividad de la médula ósea para producir glóbulos rojos o existencia de células sanguíneas más frágiles.
Los síntomas que indican anemia, varían con el tipo de anemia, pero es común que aparezca:
cansancio;
Piel pálida;