Síntomas de Hernia Umbilical
El principal síntoma de hernia umbilical es el surgimiento de un saliente en la región del ombligo, especialmente cuando el niño o el adulto hacen fuerza en la región abdominal, como cuando están riendo, llorando, tosiendo o usando el baño para evacuar. Se sabe qué es una hernia y por qué surge este problema haciendo clic aquí.
Además, también pueden surgir síntomas como dolor alrededor del ombligo, náuseas y vómitos al hacer esfuerzos, y la aparición de pequeños huesos que son palpables cuando la persona está de pie, pero que se suman cuando se acuesta.
Cuanto mayor sea la hernia, mayores son los síntomas de dolor y mareos, especialmente al levantar pesos, forzar la musculatura de la barriga o quedarse mucho tiempo de pie.
Síntomas de hernia umbilical en el bebé
En general, los bebés desarrollan los mismos síntomas que los adultos, y la aparición de la hernia surge principalmente después de la caída del ombligo después del nacimiento.
Incluso sin presentar síntomas de dolor, los niños deben ser llevados al pediatra para que él evalúe la gravedad del problema, pues cuando no se trata, la hernia puede desarrollarse y quedar atrapada en la cicatriz umbilical, una situación llamada hernia umbilical encarcelada, causando riesgo de muerte y necesitando cirugía de urgencia.
Normalmente, el tratamiento de la hernia umbilical en los bebés se puede hacer colocando un esparadrapo o una cinta para presionar el ombligo dentro de la cavidad abdominal. Sin embargo, si la hernia umbilical es muy grande o no desaparece hasta los 5 años, el pediatra puede recomendar el uso de la cirugía para resolver el problema.
Hernia umbilical en el embarazo
La hernia umbilical en el embarazo es más común en las mujeres que tuvieron hernia cuando eran niños, ya que el aumento de la presión dentro de la barriga de la gestante hace que surja una abertura en el músculo abdominal, que ya estaba fragilizado, permitiendo que una pequeña porción crea una estufa.
Generalmente, la hernia umbilical no es peligrosa para el bebé, no afecta la salud de la madre y no dificulta el trabajo de parto.
Dependiendo del tamaño de la hernia, el médico cirujano general o cirujano abdominal podrá indicar el uso de una cinta durante el embarazo y evaluará la posibilidad de hacer la cirugía para la reparación de la hernia umbilical después del parto o junto a la cesárea.
Cuando la hernia umbilical puede complicar
La hernia umbilical normalmente no es motivo de preocupación, pero si se queda atrapada, una situación llamada de encarcelamiento de la hernia umbilical, que ocurre cuando el intestino queda atrapado dentro de la hernia, ya no puede volver hacia adentro del abdomen, la cirugía debe realizarse inmediatamente. Por eso toda persona con hernia umbilical debe hacer la cirugía para su remoción.
Hay urgencia en realizar la operación porque la parte del intestino que quedó presa puede tener la circulación sanguínea perjudicada, habiendo muerte de los tejidos, que necesitan ser removidos. Esta complicación puede afectar a personas con grandes o pequeñas hernias en el ombligo, y no puede ser prevista, pudiendo ocurrir en personas que tienen la hernia hace 1 día oa muchos años.
Los síntomas de que la hernia umbilical está encarcelada son dolor intenso en el ombligo con varias horas de duración. El intestino puede dejar de funcionar y el abdomen puede estar muy hinchado. La náusea y el vómito también suelen estar presentes.
Normalmente, el tratamiento de la hernia umbilical es la cirugía, sepa todo sobre este procedimiento.
¿Quién tiene más probabilidades de tener
Algunos factores de riesgo aumentan las posibilidades de desarrollar hernias umbilicales, como:
- Historia familiar de hernias, especialmente en la infancia;
- Fibrosis quística
- Displasia de desarrollo de la cadera
- Pruebas no descartadas
- Problemas en la uretra, el canal que la orina recorre para ser expulsada;
- Recién nacidos prematuros;
- Embarazo;
- Obesidad;
- Exceso de esfuerzos físicos.
Además, este problema también es más común en los niños y en los niños negros.