Lo que es torsión en la rodilla y cómo tratar
Esto puede ocurrir durante la práctica de algunos deportes, debido a la ejecución de movimientos bruscos o debido a una lesión provocada por el impacto de algún objeto con la rodilla. El tratamiento consiste en reposo, aplicación de hielo y compresión en el lugar, sin embargo, en casos más severos, puede ser necesario recurrir a la cirugía.
¿Cuáles son los síntomas
Los signos y síntomas de una torsión en la rodilla incluyen generalmente dolor intenso e hinchazón, limitación de los movimientos y en algunos casos se puede oír un ruido en el momento de la lesión.
Además, en algunas situaciones, la rodilla puede quedar morada y también puede ocurrir hemorragia dentro de la articulación.
Posibles causas
La torsión de rodilla ocurre más frecuentemente durante el ejercicio físico, en la práctica de deportes como baloncesto, fútbol, tenis, voleibol o gimnasia por ejemplo, cuando algo alcanza la rodilla por el exterior, cuando hay un cambio de dirección repentina , cuando el cuerpo gira sobre el pie apoyado o cuando se aterra de un salto brusco, por ejemplo.
En estos casos, puede ocurrir una rotación anormal del fémur en relación a la tibia, llevando al estiramiento excesivo de los ligamentos y del menisco, pudiendo ocurrir ruptura de esos ligamentos.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico consiste en un examen físico que evalúa el movimiento, la hinchazón y la sensibilidad de la rodilla en relación al sano.
Si es necesario, se pueden también recurrir a medios de diagnóstico como Rayos X, resonancia magnética o ultrasonido.
En qué consiste el tratamiento
Generalmente, el tratamiento se inicia con reposo, evitando al máximo posar el pie en el suelo, de forma a no hacer peso sobre la rodilla. Para ello, la pierna debe mantenerse elevada y para la gente desplazarse, se pueden usar muletas.
Durante el período de reposo se pueden aplicar compresas de hielo en la rodilla durante unos 30 minutos cada hora, e ir aumentando el intervalo de aplicaciones a lo largo de los días y medias elásticas o ligaduras de compresión, que ayudan a inmovilizar la rodilla.
El médico puede aconsejar una terapia de rehabilitación con la ayuda de un fisioterapeuta, que ayudará a recuperar el movimiento, la fuerza y el equilibrio y en algunos casos puede prescribir medicamentos analgésicos y antiinflamatorios.
En algunos casos puede ser necesario realizar una cirugía, especialmente si la persona lesionada es joven o es un atleta que desee seguir practicando deporte. Además, este procedimiento también es aconsejado en situaciones en que la lesión compromete las actividades del día a día o en que la lesión sea muy grave.
El tiempo de recuperación depende mucho de la gravedad de la torsión en la rodilla, pero generalmente los atletas pueden volver a practicar el deporte unos 12 meses después de la lesión.