Hay una serie de impresionantes beneficios para la salud asociados con la alfalfa, incluida su capacidad para reducir los niveles de colesterol, mejorar la digestión, proteger la salud del corazón y prevenir el cáncer. También ayuda a mejorar las condiciones respiratorias, desintoxica el cuerpo, ayuda a la inmunidad, acelera la curación y reduce la inflamación.
La alfalfa es un cultivo importante de forrajeo en países de todo el mundo y en ocasiones recibe el nombre de Lucerna en Europa y otros países. Aunque originalmente se cultivó en el sur de Asia Central, ahora se ha convertido en un cultivo mundialmente reconocido debido a su impresionante contenido nutricional y versatilidad en el uso. Se usa principalmente como materia prima para animales y ganado, particularmente el heno de esta planta. Conocida científicamente como Medicago sativa, esta planta sigue siendo un cultivo básico importante para los humanos también, principalmente para estos brotes.
Con altos niveles de vitamina B, vitamina C, vitamina D, vitamina E y una variedad de proteínas y otros minerales importantes, agregar brotes de alfalfa a ensaladas y sándwiches es una manera fácil de darse un impulso nutritivo. El contenido de fibra y el perfil nutricional que beneficia a los animales son ligeramente diferentes a la parte de la planta que los humanos comen, pero el valor es claro.
Discutamos los beneficios comunes de la alfalfa en detalle.
La alfalfa ha demostrado que tiene una cantidad impresionante de fibra dietética, que es muy importante en la lucha contra el colesterol. Además de muchos otros compuestos químicos, llamados saponinas, la fibra puede adherirse al colesterol y evitar que se bloquee en las paredes arteriales. Esto también ayuda a equilibrar los niveles de colesterol HDL (bueno) en el cuerpo. Esto puede prevenir la acumulación de placa, aterosclerosis, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Esta planta se usó a menudo en el tratamiento tradicional de la artritis y otras afecciones inflamatorias. La alfalfa posee altos niveles de vitamina C y vitamina B, así como calcio y compuestos antioxidantes. Todo esto puede reducir la inflamación en las articulaciones y alrededor del cuerpo, al tiempo que fortalece el sistema inmunológico y previene las enfermedades crónicas y el estrés oxidativo.
La fibra dietética es ampliamente utilizada por el cuerpo para monitorear y optimizar la salud digestiva. La fibra dietética no solo puede aumentar las heces y acelerar su movimiento a través de los intestinos, sino que también puede reducir la inflamación en el intestino. Por lo tanto, ayuda a resolver problemas como indigestión, hinchazón, calambres, diarrea, estreñimiento y un desequilibrio bacteriano en la microflora intestinal. Por lo tanto, se recomienda consumir tabletas de alfalfa regularmente para una mejor evacuación intestinal.
En su uso más tradicional, los brotes de alfalfa se utilizaron para hacer una cataplasma para aplicar sobre heridas y lesiones para inducir una curación más rápida y la prevención de la infección. Los componentes antioxidantes de la alfalfa protegieron el área expuesta, mientras que otros minerales y nutrientes estimularon el flujo de sangre al área y aumentaron la tasa de reparación y curación. El alto suministro de proteínas en las tabletas de alfalfa, cuando se consume, también es un gran impulso para el crecimiento, el desarrollo y la reparación.
Con un alto contenido de vitamina C, este brote es un refuerzo ideal para su sistema inmunológico. La vitamina C no solo estimula la producción de glóbulos blancos, sino que también actúa como un antioxidante para eliminar el estrés oxidativo. Además, las vitaminas B y la vitamina E también actúan como reguladores metabólicos y compuestos antioxidantes en todo el cuerpo, y ambos también se encuentran en este brote sin pretensiones.
La alfalfa ha sido ampliamente utilizada en todo el mundo en el tratamiento de enfermedades renales, principalmente debido a sus propiedades diuréticas. Al estimular una micción más frecuente, la alfalfa puede acelerar la desintoxicación del cuerpo, junto con el exceso de sales, grasas y agua.
Los fitoestrógenos son algunos de los compuestos químicos más impresionantes, y son extremadamente importantes para el cuerpo en la batalla contra las enfermedades crónicas, como el cáncer y las enfermedades coronarias. Estas hormonas actúan esencialmente como antioxidantes y evitan las mutaciones en las células sanas, lo que reduce el riesgo de cáncer. También se sabe que los componentes activos de esta planta se unen bien con los carcinógenos en el cuerpo y el colon, promoviendo así su expulsión del cuerpo antes de que puedan causar más daño.
Tradicionalmente, la alfalfa se usaba ampliamente en el tratamiento de afecciones respiratorias, como la bronquitis, la gripe y el resfriado común, además de otras infecciones virales y bacterianas. La alfalfa tiene propiedades antiinflamatorias, lo que la hace útil en el tratamiento de diversas afecciones respiratorias, como el asma, al tiempo que fortalece el sistema inmunitario para neutralizar las infecciones subyacentes que atacan las vías respiratorias.
El potasio y el hierro se encuentran en un suministro significativo dentro de la alfalfa, y estos benefician al corazón de diferentes maneras. El potasio es un vasodilatador, que ayuda a disminuir la presión sanguínea al liberar la tensión en los vasos sanguíneos y las arterias. Además, el contenido de hierro de estos brotes aumenta la producción de glóbulos rojos, lo que mejora la circulación y asegura que los sistemas de órganos del cuerpo estén bien oxigenados. Esto ejerce menos presión sobre el corazón porque las extremidades exigirán menos sangre y oxígeno de un corazón que ya está sobrecargado de trabajo.
Debido al alto contenido de saponinas y canavanina, el consumo excesivo de brotes de alfalfa en bruto puede tener efectos adversos en el cuerpo de la siguiente manera:
Ver tambiénLa alfalfa debe prepararse adecuadamente y consumirse con moderación. Para tener un consumo humano seguro, también puede optar por las tabletas de alfalfa. Dicho esto, la alfalfa es una fuente concentrada de nutrientes que definitivamente debes agregar a tu dieta.