La base del tratamiento para el reumatismo en los huesos es el cambio en el estilo de vida. Se recomienda no hacer muchos esfuerzos, descansar siempre que sea posible y alimentarse bien. Además, en los períodos de crisis se deben tomar antiinflamatorios, analgésicos y hacer fisioterapia. Seguir estos consejos es muy importante para que la enfermedad no se agrave y el individuo se quede aún más limitado, sin conseguir hacer sus actividades del día a día.