es.odysseedubienetre.beEl Mycoplasma genitalium es una bacteria sexualmente transmisible que infecta el sistema reproductivo masculino y femenino, causando problemas como la inflamación persistente del útero en las mujeres y la uretra en los hombres. El tratamiento de esta enfermedad se realiza con el uso de antibióticos, siendo necesario usar el condón para prevenir nuevas infecciones.
Esta bacteria causa síntomas como dolor y ardor al orinar, y se identifica a través del examen de orina o de las secreciones del pene o del útero, y el resultado normalmente trae el nombre Mycoplasma sp. El tratamiento debe iniciarse tan pronto como se identifique la enfermedad, ya que puede generar problemas como la infertilidad e inflamación de la próstata.
Los principales síntomas causados por la infección por Mycoplasma genitalium son flujo acuoso en el pene en los hombres y sangrado fuera del período menstrual, normalmente después del contacto íntimo, en las mujeres. Sin embargo, algunos síntomas que pueden ocurrir tanto en hombres como en mujeres son:
En presencia de estos síntomas se debe buscar al ginecólogo o al urólogo para realizar exámenes que puedan identificar la causa e iniciar el tratamiento adecuado.
En hombres, la infección por Mycoplasma genitalium normalmente causa inflamación de la uretra, que es el canal por donde pasa la orina. Sin embargo, cuando no se trata, la infección puede agravar y llevar la inflamación en los testículos y en la próstata.
En mujeres, esta infección causa inflamación del útero y del cuello del útero, y cuando no se trata puede aumentar el riesgo de complicaciones como parto prematuro e infertilidad.
El diagnóstico de Mycoplasma genitalium se realiza a partir de la presencia de los síntomas de inflamaciones recurrentes de la uretra y del útero, y de exámenes de cultivo que detectan la presencia de la bacteria a partir de muestras de orina o de líquidos del pene o del útero, pudiendo traer en los resultados la palabra Mycoplasma sp., que representa infección por cualquier tipo de Mycoplasma.
El tratamiento de esta enfermedad se realiza mediante el uso de antibióticos para eliminar la bacteria, que deben tomarse tanto por la persona infectada como por su compañero. Durante el tratamiento, se debe evitar el contacto íntimo para garantizar que una nueva infección no suceda.
